Diversos movimientos campesinos solicitaron hoy al gobierno que se derogue el decreto que ordena un desarme general en el Bajo Aguán,
zona del norte de Honduras, donde más de 60 personas han muerto producto del conflicto de tierras.
El Movimiento Auténtico Revolucionario Campesino del Aguán (MARCA), el Movimiento Unificado Campesino (Muca), el Movimiento Campesino de San Miguel, Cortés; la Asociación Nacional de Campesinos Hondureños (Anach), la Central de Trabajadores del Campo y la Vía Campesina, entre otras organizaciones, instaron a las autoridades a parar 'la voraz persecusión' contra los labriegos.
En un comunicado, los grupos campesinos abogaron por la derogación de la Ley de Control de Armas,
por considerarla inconstitucional, en vista de que no es de aplicación general'.
Además, aseguraron que la regulación 'solo protege a grupos armados de los terratenientes'.
Los dirigentes del sector rechazaron 'la permanente y voraz persecución contra los movimientos campesinos
que se ha incrementado con mayor intensidad en el Bajo Aguán no solo contra los campesinos, sino también en contra de personas que nos apoyan en nuestra lucha'.
De igual manera, conderon el asesinato del abogado Antonio Trejo Cabrera
y del fiscal Manuel Díaz,
perpetrados esta semana en Tegucigalpa y Choluteca, respectivamente, por lo que pidieron que se castigue a los responsables materiales e intelectuales de dichos crímenes.
Finalmente, responsabilizaron al Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial 'de lo que está ocurriendo, de lo que pueda ocurrir y de los planes macabros contra el campesinado de Honduras'.