Tegucigalpa, Honduras.- Para evitar que la crisis preelectoral escale en Honduras, los diferentes actores deben primar sus acuerdos sobre la base del marco legal, la transparencia y los valores democráticos, además deben respetarse la independencia y separación de poderes para sortear el riesgo que el proceso pueda empezar a judicializarse y así entramparse, sostuvo Ana María Méndez, directora de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés).
“Preocupa los acontecimientos recientes que se han dado ante la falta de estabilidad institucional del ente que es el garante de la voluntad popular y garante de la integridad del proceso electoral en general que es el Consejo Nacional Electoral”, expresó Méndez.
Dijo que también preocupaba los reportes de injerencias políticas en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y la intención de la consejera Ana Paola Hall de renunciar a su cargo, denunciando presiones y amenazas. "Eso genera mucha incertidumbre y falta de confianza hacia el proceso electoral", resaltó Méndez
Consideró que para encontrar una salida a la crisis, en primer lugar, tiene que haber un compromiso de los miembros del Consejo Nacional Electoral de sobrepasar estas diferencias y garantizar la transparencia en la toma de decisiones.
“Creo que es muy importante que no se pierda de vista que la ciudadanía demanda información verídica, confiable, tanto de los lineamientos que fueron aprobados en consenso de parte los consejeros como la controversia que ha surgido a través del pliego de condiciones”, opinó.
Para tener un proceso limpio se requiere la mayor transparencia posible, además de un compromiso de abrir las puertas a las misiones de observación internacionales y nacionales, demandó la directora de WOLA.
Frente a la arremetida del poder Ejecutivo, Legislativo y el partido en el poder con el fin de controlar el CNE, Méndez pidió separar los problemas técnicos de los políticos. "Es que hay un serio problema en el diseño del sistema electoral hondureño, el cual por los recientes acontecimientos amerita una revisión y un diálogo para proponer reformas que brinden certeza jurídica".
El mecanismo de selección de los consejeros del CNE es altamente influenciado por los partidos políticos. Si bien el partido en el gobierno ha generado esta crisis, también hay injerencias de las otras fuerzas políticas, lo cual atenta y vulnera la integridad del proceso electoral, dijo.
Sobre si las elecciones están en riesgo, la directora de WOLA sostuvo que faltan cinco meses. “Para las elecciones del 2021 el sistema de transmisión de resultados no se contrató hasta septiembre. Yo diría que sí hay riesgos, pero son subsanables, salvables con un diálogo político abierto y con un compromiso de los sectores políticos, pero también del Consejo Nacional Electoral, anteponiendo sobre todo los valores, los principios y compromisos democráticos y principalmente la ciudadanía que tiene derecho a elegir a los representantes que ellos decidan”.
Recomendó que en cualquier acción o diálogo colocar por delante el marco legal, constitucional y el respeto del Estado de Derecho y los derechos de las y los hondureños. “Tiene que haber transparencia y principalmente independencia y separación de los poderes del Estado, esto es muy importante porque nos preocupa de gran manera y vemos como un riesgo que se pueda empezar a judicializar el proceso y que eso lo entrampe”, analizó.
Observación
Méndez explicó que los ojos de la comunidad internacional están puestos sobre el proceso electoral hondureño a tal nivel que la Organización de Estados Americanos (OEA) enviará a Tegucigalpa el próximo 27 de julio un equipo técnico, además de confirmar, junto con la Unión Europea, las misiones de observación electoral. Estos procesos requieren de mucha garantía y por lo tanto es importante que estas misiones puedan verificar el proceso, expresó.
Asimismo, informó que el gobierno de Estados Unidos, a través del Congreso, tiene un interés muy grande en apoyar el proceso democrático en Honduras y para ello a finales de junio, reciente, se presentó una ley con apoyo bipartidario que va a entrar a votación la próxima semana en donde se establece la importancia de garantizar unas elecciones libres, transparentes y justas.
Esta normativa también tiene como finalidad respaldar a la sociedad civil para que puedan hacer un trabajo de monitoreo y de observación, junto al apoyo a las misiones de la OEA de la Unión Europea, al mismo tiempo lleva implícito un componente muy riguroso respecto a sanciones individuales para todos aquellos personas o actores que interfieran en el proceso, añadió.
Castellanos: Partido Liberal saldrá afectado
A nivel nacional también diferentes sectores y organizaciones atentas al desarrollo del cronograma electoral, el cual momentáneamente está trabado luego que la consejera Hall, representante en el CNE por el Partido Liberal, pusiera su cargo a disposición, dejando a su institución política en una total vulnerabilidad frente a las ambiciones del partido gobernante.
De acuerdo con Julieta Castellanos, socióloga y exrectora universitaria, la crisis que está viviendo el país se agudiza o escala a más con la puesta a disposición de cargo de la consejera Hall.
Antes de este momento el partido Libertad y Refundación (Libre) enfrentaba una crisis muy fuerta, porque tenía los señalamientos muy claros, los problemas estructurales de país que tienen que ver con la pérdida de credibilidad "con la no llegada de la Cicih, el narcovideo, Koriun, los problemas en el sistema de salud, la no extensión de TPS y el desempleo".
Su crisis se agudizó mucho más con la filtración de un video de la conversación de José Carlos Cardona, ministro de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) con la diputada Isis Cuéllar, situación que se agravó más con la publicación de los diputados de Libre que recibieron dinero en los dos últimos años, y que algunos de ellos lo orientaron para campaña política. Todo eso era el escenario preelectoral de Libre, lo que le provocaba un desgaste muy grande.
“Libre trataba de distanciarse de ese tema y construir una crisis interna en el Consejo Nacional Electoral. La construcción de esta crisis es porque va muy mal en las encuestas, la candidata oficialista está en un tercer lugar. Unos 15 puntos de diferencia de los otros dos candidatos de la oposición y por supuesto Libre quiere asegurarse el triunfo y por eso busca tener el control del CNE”, pormenorizó la socióloga.
Rememoró que Libre estuvo forcejeando por tener ese control y no lo logró. Finalmente, la consejera Hall cuando pone su cargo a disposición y escribe las razones por las cuales no puede participar en una reunión de los miembros consejeros. La crisis se traslada inmediatamente al Partido Liberal.
Ahora ya nadie está hablando de la crisis de Libre, “la crisis la trasladan al Partido Liberal, porque primero el partido no tiene los votos suficientes ni los alcanza con la oposición para nombrar a una nueva consejera en el caso que la consejera Hall renuncie", describió Castellanos.
La exrectora es del criterio que el apoyo de Libre implicará ciertas condiciones. “Libre va a condicionar apoyar una nueva consejera o consejero si coloca alguien de su simpatía y que obedezca al ingeniero Carlos Flores en lo que ellos decidan y que se revierta la verificación que es lo que tiene estancado los problemas o la crisis que provocan en el CNE”.
“Esta complejidad hoy ha escalado a más porque ha quedado claro que el aliado de Libre es el Partido Liberal, aunque no sea todo el partido, pero la consejera, a algún sector de Libre corresponde y también a algún sector de Partido Liberal y esto apunta a una negociación de dos expresidentes Manuel Zelaya y Carlos Facussé”, deploró.
Por lo tanto, si el Partido Liberal va a cargar con una negociación donde no participa, sino solamente una facción hegemónica, aunque sea minoritaria, es un golpe durísimo para esa institución política que podría llegar a gobernar después de estar 16 años fuera del poder.
En esta crisis Libre no va a ceder, por lo tanto “el costo de una salida conveniente a Libre la va a cargar el Partido Liberal y eso obviamente golpea a su candidato, a menos de que el Partido Liberal hable claramente y diga quién negoció ese cambio o esa posición de la consejera Hall y cuáles fueron los temas de negociación, a menos que haga eso puede salvarse", reflexionó Castellanos.
De lo contrario, dijo, el Partido Liberal va a cargar con esa percepción ciudadana que es un ente que se pliega, que transa, que negocia y que antepone primero los intereses de sus dirigentes a los del país. Libre probablemente se salga con su propósito, pero va a ser a costa del sacrificio de imagen y voto del Partido Liberal en las próximas elecciones de noviembre, presagió.
