Tegucigalpa, Honduras.- La Asociación de Medios de Comunicación de Honduras (AMC) condenó con fuerza las recientes declaraciones del general Roosevelt Hernández, acusándolo de sostener un “mensaje peligroso” para los medios hondureños, luego de ataques verbales, hostigamiento y amenazas institucionales.
Según el comunicado, las declaraciones del jefe militar, publicadas por los canales oficiales de las Fuerzas Armadas (FF AA) el pasado 6 de noviembre, “constituyen un agravio y un mensaje peligroso para toda la prensa del país”.
La AMC lamentó que la institución castrense utilicen su vía de comunicación para “amedrentar, estigmatizar e intimidar” mediante ofensivas sistemáticas que, según las organizaciones, sobrepasan los límites que deben respetar en una democracia.
Calificó las declaraciones como “desafortunadas e infames” y advirtió que este tipo de mensajes pueden alentar la intolerancia y la división dentro de la sociedad hondureña.
En respuesta a los señalamientos a Grupo OPSA, representado por su presidente ejecutivo Jorge Canahuati Larach, a quien acusó de estar detrás de una campaña contra las Fuerzas Armadas por, según acusa de forma temeraria, negocios relacionados en el Instituto de Previsión Militar (IPM), la AMC calificó las acusaciones de Hernández como “infundadas” y exigió al militar probar sus afirmaciones en los tribunales.
Entre las acciones cuestionadas figura una demanda promovida por Hernández contra 12 medios de comunicación que solicitaba obligar a periodistas a revelar sus fuentes, lo que generó rechazo por organismos de defensa de la libertad de prensa.
La persecución se dirigió contra LA PRENSA, EL HERALDO, Radio Cadena Voces (RCV), La Tribuna, Radio América, Abriendo Brecha, CHTV, Hable Como Habla, Q´Hubo TV, Hondudiario, Criterio HN y Noticias 24/7.
La asociación recordó que desde su creación en 1970 ha defendido los valores democráticos, la libertad de expresión y la institucionalidad del país. En ese sentido, hizo un llamado a las autoridades a evitar discursos que puedan fomentar la confrontación o la desconfianza hacia la prensa.
“Cualquier amenaza o vulneración contra los medios debe ser entendida con el más elevado sentido de apertura y tolerancia”, señala el pronunciamiento.
El general Hernández no solo ha criticado abiertamente al periodismo, pues en más de una ocasión ha acusado a quienes cuestionan el actuar militar de integrar “una narrativa mediática falsa”, sin presentar evidencias claras.
Por lo anterior, la organización internacional Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) ha respaldado la postura crítica a esta ofensiva contra periodistas y medios, calificando estas acciones como intentos de “desprestigio, intimidación y criminalización mediática”.