En una hazaña se ha convertido el paso de miles de personas hacia otros municipios vecinos al circular a diario por el puente colgante sobre el río Humuya.
Las condiciones deterioradas que presenta el paso de madera son visibles, provocando que la adrenalina de la gente suba al máximo como si se tratara de un deporte extremo.
Cables de hierro oxidados y desprendidos sostienen el puente de 230 metros de largo que fue construido hace más de 50 años.
El desprendimiento de pedazos de la madera de su superficie ha hecho grietas que pueden provocar que una persona pueda fracturarse al pasar o que la llanta de un carro quede estancada.
Pero la mayor preocupación de la gente es cuánto peso podrá soportar la madera que está cumpliendo su vida útil y que en cualquier momento alguna sobrecarga haría que caiga al vacío.
El riesgo de caer desde una altura de más de 100 metros a las aguas del río Humuya es mayor en temporada de lluvia, ya que la madera saturada de agua se pone resbaladiza y hace que los conductores pierdan la estabilidad del auto.
Según pobladores, en más de una ocasión automóviles pesados y livianos han quedado casi colgando a la orilla del puente por haber perdido el control de los mismos.
Comunicación
El paso colgante se ha convertido en la más importante vía de comunicación para los 7,000 habitantes de Ojos de Agua que viajan a los municipios de
La Libertad, San Jerónimo y Comayagua.
Por el paso acarrean quintales de granos básicos y cañas arriesgando los productores sus vidas.
Una de las precauciones que han tomado los productores y autoridades de la localidad es que solo deben pasar buses con 15 personas y carros pick-up con menos de 40 quintales de maíz y frijoles.
Sin embargo, por el paso colgante las personas llegan en unos 30 minutos a La Libertad, el municipio más cercano, mientras que por la otra calle alterna se tardarían alrededor de tres horas.
El costo de transporte para los productores de granos básicos y caña es más barato por ahorrarse largos tramos de carretera.
Estudios
Francisco Mencías, el fiscal del Comité pro construcción del puente, expresó que han realizado varios intentos por hacer el puente, pero solo quedan en intenciones.
El alcalde, Marvin Adonay Romero, espera que el gobierno de Juan Orlando Hernández tenga la voluntad de trabajar en favor de la comunidad. “Es voluntad política del gobierno de Juan Orlando si se hace, porque como Alcaldía es imposible que lo vamos a hacer, pero sí podemos apoyar para hacerlo juntos”, apuntó Romero.