Tegucigalpa, Honduras.- El saldo de la deuda pública de la administración central de Honduras cerró 2024 con un incremento de 706.3 millones de dólares respecto a 2023 al pasar de $16,667.8 a $17,374.1 millones.
Así lo revela un informe de la Secretaría de Finanzas (Sefin), el que indica que ese resultado estuvo determinado por el incremento en la deuda pública externa de 8,510.8 a 9,304.2 millones de dólares, que significó $793.4 millones más, recursos provenientes del denominado “bono temático” de $700 millones. Respecto a la deuda pública interna observó una caída de 8,157 a 8,069.9 millones de dólares, o sea $88 millones menos.
Añade que en 2024 los desembolsos sumaron 1,350.6 millones de dólares. El 51.8% ($700 millones) de los desembolsos recibidos provienen de la colocación del bono soberano 8⅝, el 41.5% proceden de organismos multilaterales siendo el Banco Mundial con $226.9 millones el mayor aportante, seguido por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con $221.8 millones, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) con $108.5 millones, OPEC/OFID con $2.2 millones y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) con $1.2 millones.
Además, las instituciones bilaterales desembolsaron 89.9 millones de dólares que representan el restante 6.7%, de los que la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA), es el mayor aportante con $88.4 millones, el Banco de Crédito para la Reconstrucción de Alemania con $1.5 millones y Cassa Depósito Artigiancassa de Italia con 12,200 dólares.
No obstante, el análisis de la Dirección General de Crédito Público de la Secretaría de Finanzas indica que el saldo de la deuda pública equivale al 47.9% respecto al PIB ($36,306 millones), lo que representó una reducción en relación a 2023 que fue de 48.6% del Producto Interno Bruto ($34,331.2 millones), con una reducción de 0.7 puntos.
El informe de la Sefin explica que la deuda pública de la administración central se estructura en 64% ($11,097.2 millones) por moneda extranjera y el restante 36% ($6,276.9 millones) en moneda nacional.
Por acreedores, el 67.4% (6,266.5 millones de dólares) corresponde a la banca multilateral, el 21.5% ($2,000 millones) en manos de tenedores de bonos soberanos, los acreedores bilaterales participan con 9.7% ($907.5 millones) y el restante 1.3% ($130.2 millones) en poder de bancos comerciales u otras instituciones financieras y proveedores.
Otro dato relevante es que el 60.2% del saldo de la deuda externa (9,304.2 millones de dólares) está contratada en términos no concesionales, con $5,596.8 millones, y el restante 39.8% concesionales ($3,707.4 millones).
Agrega que el endeudamiento externo se constituyó, principalmente, en dólares de Estados Unidos de América, que representan el 90.1% ($8,378.8 millones), 5.5% en Derechos Especiales de Giros (DEG) (equivalente a $514.5 millones), yen, japonés con 1.9 % ($177.5 millones), en euros (equivalente a $162.9 millones) con el 1.8% y finalmente un 0.8% ($70.6 millones) en otras divisas.