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Real Madrid a demostrar por qué es el favorito

En el APOEL milita el portero español Urko Pardo, belga de 28 años, formado en Barça. “Una parte de mi corazón sigue siendo culé y espero que podamos eliminar al Madrid”.

27.03.2012

Real Madrid quiere dar el primer paso rumbo a las semifinales y despejar, de una vez por todas, las dudas que ha generado su juego en las jornadas precedentes, ante un Apoel que ansía mantener su sueño europeo y asustar al todopoderoso de Chamartín.

La victoria del sábado ante la Real Sociedad parece ser el bálsamo perfecto con el que los Merengues afrontarán la visita a Chipre, donde les espera un APOEL que sabe que tiene todo para ganar, por lo que cederá la presión al rival.

Un apellido famoso...

En APOEL, que ha ganado cinco de sus siete partidos en casa en la Champions League de esta temporada, comenzará en el banquillo un jugador con apellido de pasado madridista: Esteban Solari, hermano de Santiago, quien defendió cinco años la camiseta blanca; el argentino asume el papel de revulsivo y es consciente de la dificultad de dar la sorpresa ante el Real Madrid.


“Les tenemos mucho respeto, pero vamos a jugar con muchas ganas, fe y corazón”, prometió, al tiempo que los medios locales titulan un esperanzador “Encuentro con la historia del fútbol”.

El técnico de la Leyenda, el serbio Ivan Jovanovic, intenta aislar a sus jugadores de la presión y asegura que “no tiene mucho que perder”, ya que “no se puede tener un rival más fuerte que Real Madrid”. La única ausencia de importancia del APOEL será la del medio brasileño Gustavo Mantuca, una de las revelaciones del equipo, sancionado para la ida.

Sin Xabi Alonso ni Lass...

En el camino de recuperar el prestigio perdido tras seis temporadas sin superar los octavos de final, el primer objetivo del equipo de José Mourinho es igualar las semifinales de la pasada campaña; para ello, el portugués dispone casi al completo de su equipo de lujo.

Eso sí, el jugador que le falta es clave: Xabi Alonso. Y sin la referencia del centro del campo madridista, Mourinho tendrá que improvisar. Xabi lo juega todo y a su ausencia se ha sumado la extraña molestia muscular de Lass Diarra, que le dejó en la capital de España.

Después de ser sustituido durante la primera mitad en El Madrigal (ante Villarreal), para cambiar la estrategia que no le daba resultado a Mourinho y no jugar por sanción ante la Real Sociedad, Lass era importante en Nicosia, como pareja de Sami Khedira en el centro del campo; esto provocará que Esteban Granero retome el testigo y asuma el mando de la función.

Mourinho, que ha vuelto a hablar ante los medios a pedido expreso de la UEFA, pide públicamente “equilibrio” y recupera a dos jugadores indiscutibles que no jugaron en la goleada a la Real Sociedad: el portugués Pepe vuelve a la defensa y el alemán Mesut Ozil a la media punta por la derecha. Pero, ante todo, los de Casa Blanca planean usar su artillería pesada, con un trío ofensivo estelar formado por Cristiano Ronaldo, Gonzalo Higuaín y Karim Benzema. Vaya lujo.

Otro duelo con CR7...

Con 92 tantos entre los tres en todas las competiciones, Cristiano, Benzema e Higuaín han dado sobradas muestras de su instinto ante la portería rival. Si continúan el ritmo podrían batir esta temporada el récord de 100 goles en la liga de las estrellas, que estableció en la 2008-2009 otro trío para el recuerdo: Lionel Messi, Samuel Eto’o y Thierry Henry para el FC Barcelona.

En ese “tridente”, la punta más afilada sigue siendo el portugués Cristiano Ronaldo; el exjugador del Manchester United, insaciable y a menudo acusado de egoísta, responde al perfecto arquetipo de estrella goleadora: en liga suma ya 35 dianas, manteniendo un emocionante pulso con el argentino Messi (también 35), y tiene en mente batir su plusmarca del año pasado, cuando terminó con 41.

“Los récords están para batirlos, pero lo que me importa es ganar títulos”, puntualizó en globoesporte.com el astro madridista, que ya tuvo en el duelo Chipre-Portugal, rumbo a la Euro, una mala experiencia en esta ciudad, al ser silbado siempre que tocaba la bola.