TEGUCIGALPA, HONDURAS.- De aquel gol del Gato Pavón Molina al último del Ángel del Gol se escribieron siete batallas y el capricho de la redonda quiso que en este Clausura Motagua y Real España se enfrenten por octava vez en una final de la Liga Nacional.
La Máquina parece llegar con el viento de los pronósticos a favor porque fue superlíder y despachó cómodamente a Marathón, pero el Mimado supo sortear los altibajos del torneo y en semifinales dio un golpe de autoridad al despachar al tetracampeón Olimpia. ¿Quién se llevará el octavo cruce?
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Los Aurinegros se agarran de su superliderato en este Clausura y los Azules de lo curtido de su plantel en instancias finales, pero lo cierto es que a la octava arriban con la serie 4-3 a favor de la Máquina.
Antonio Pavón Molina se puso la capa de héroe en la final del torneo de 1974 al anotar el único gol con el que el España de Chelato Uclés tumbó al Motagua de Carlos Padilla en la primera de las finales entre ambos clubes.
Chito, primer héroe azul
Dos años más tarde, en la 76/77, los Catedráticos volvieron a celebrar gracias a un 0-0 en la capital y un 4-1 en San Pedro Sula, firmado por Manuel Soto Araya, Gilberto Yearwood, Alberto Ferreira y Jimmy Bailey.
De la mano de un gol de Salvador Bernárdez en la ida (1-0) y un triplete de Luis Chito Reyes en la vuelta en SPS (4-1), el Mimado del chileno Néstor Matamala consiguió la primera corona a costa del Búho en la temporada 78/79.
Un doblete de Richardson Smith en el Morazán firmó la tercera aurinegra ante Motagua y la sexta de su historia en la 90/91 (2-1), pero solo un torneo más tarde un solitario tanto de Alex Geovanny Ávila le dio la revancha al Ciclón de Ángel Ramón Rodríguez.
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Con la serie 3-2 para los del norte, el destino decidió que la primera final de los torneos cortos (Apertura 1997/98) fuese entre Águilas y Búhos. Y allí celebraron los Azules.
Francisco Pancho Ra, una chilena de Óscar el Mexicano Lagos y un gol de Amado Guevara encarrilaron el título azul con ese 3-0 que se redondearía en la vuelta en la capital.
Tejeda firmó la última
Nuevamente los dos primeros se apuntaron en las redes para firmar un 2-1 que le dio la corona al equipo de Ramón Maradiaga y que sirvió para que Motagua empatara el mano a mano en finales ante los Búhos (3-3).Pasaron dos décadas para que se volvieran a ver las caras en la pelea por el trono y ahí los de San Pedro Sula nuevamente inclinaron la balanza para su lado. Un doblete de Darixon Vuelto en el Olímpico (2-0) encaminó la consagración de la Máquina de Martín el Tato García.
Un doblete de Rubilio Castillo había puesto en suspenso la película, pero en el tiempo extra (108) apareció la cabeza de Ángel Tejeda para poner la serie 4-3 y darle la decimosegunda estrella al España. Hoy, caprichosamente, Tejeda viste de azul y buscará devolverle al Mimado la copa que le arrebató aquel 30 de diciembre de 2017. Este torneo ya vacunó a su ex en el 2-1 de la primera vuelta y seguramente querrá volver a festejar enfundado en la camisa azul.
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“Tratamos de formar una familia. No es que no la teníamos, pero habían fisuras que logramos recomponer y eso ha sido fundamental. Nos costó asimilar lo de los cambios (en el cuerpo técnico), por eso tuvimos una mala racha, pero logramos recomponer en el camino y hoy estamos en una final”, advirtió el portero motagüense, Marlon Licona.
El octavo pulso está a la vuelta de la esquina. ¿Motagua empatará el historial o España se despegará dos títulos?
