Uno de los grandes se ha ido. Carlos Padilla Velásquez, el bien llamado Zorro, murió la madrugada de ayer a los 79 años de edad en esta ciudad capital. Las causas de su muerte fueron naturales.
Padilla fue acompañado por un gran número de personas ayer en su velatorio, que le recordaron como uno de los mejores entrenadores que tuvo el fútbol nacional en la historia. De hecho, una parte de nuestro registro balompédico fue escrito bajo su firma, deja un gran legado.
El Zorro es hasta hoy el técnico que más campeonatos de Primera División consiguió, con un total de seis con las playeras de Platense (65), Motagua (70 y 73, dicho sea de paso el equipo de sus amores), Real España (75 y 76 completando el tricampeonato de Real España) y Olimpia (87). Para un apunte más claro, Padilla fue el primer entrenador campeón de la Liga Nacional, con Platense.
Además es junto a Alfonso Foncho Uclés el entrenador que más ascensos consiguió: Atlético Fusep (79-80), Pumas UNAH (86-87), Real Maya (91-92) y Valencia (2003-04).
Y si le sumamos el ascenso a la Liga de la Federación Extraescolar (antes de LNP) con el Troya en 1961 (club que él mismo fundó); junto al título de campeón con el Águila de El Salvador (1960), no está de más nombrar al Zorro como el más laureado entrenador de la historia del fútbol nacional. Padilla Velásquez además fue DT de la Selección Nacional en el IX Campeonato Centroamericano y del Caribe de Fútbol (1960) y en las eliminatorias rumbo a los mundiales de México 70 y Alemania 74.
Vale recordar que además fue presidente del Colegio Nacional de Entrenadores de Honduras.
Padilla fue un destacado jugador desde su natal San Antonio del Norte, La Paz y luego de estudiar en el Instituto Central Vicente Cáceres, se dedicó a la práctica del fútbol. Se especializó como entrenador al lado del recordado brasileño Pedro Otto Bumbel.
El legado del Zorro Padilla queda palpable en la memoria estadística del fútbol hondureño, además de inducir a sus hijos Carlos Padilla Jr. y Ángela Tita Padilla a los estudios y la práctica del deporte, especialmente al baloncesto.
En los últimos años, Padilla dejó la dirección técnica de clubes debido a problemas con su espalda.
En una última entrevista con EL HERALDO en agosto de 2013 (para el aniversario de Motagua), el Zorro contó innumerables historias, anécdotas y vivencias desde su casa, donde solía pasar sus tardes entre libros, fotografías y recuerdos. “Un hombre que no lee, aprende y se informa, está muerto en vida”, dijo aquella vez el Zorro que siempre recordaremos.
