Como dice el famoso dicho, “El amor entra por el estómago”, y ese amor ha entrado en cada uno de los paladares de muchos clientes que visitan constantemente la repostería El buen gusto.
Desde hace 15 años, el centro de Tegucigalpa, para ser más específico, el barrio Abajo, ha sido contagiado por los aromas que desprende cada una de las delicias que esta repostería realiza día a día para satisfacer hasta los gustos más exigentes.La repostería El buen gusto es un negocio familiar que está bajo la supervisión de Angelina Aguilar, quien junto con su familia han podido sacarlo adelante.
“Gracias a mi mamá inició mi gusto por la repostería, ya que ella elaborada pan”, detalló Angelina Aguilar, propietaria de esta repostería, quien también agregó que a la edad de 16 años comenzó a realizar sus primeros pasteles para familiares y amigos.
Después decidió especializarse más en el mundo de la repostería, mediante cursos que recibió en el Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop), en los años 80; en la cual estuvo durante dos años estudiante para ser una excelente repostera. Angelina se acostaba muy tarde para aprender las recetas, pero poco a poco lo logró y ahora tiene ese toque único que caracteriza a su negocio.
La microempresaria aconsejó a las personas que hagan que su negocio de comidas se caracterice por contar con una receta única, ya que así atraerá a mucha más clientela. “Recuerde también de ejecutar su labor con mucho amor, para que le salga todo a
la perfección”.
El buen gusto
“El nombre de la repostería El buen gusto, surgió debido a que siempre he tenido el pensamiento de que al cliente hay que darle lo mejor, para que así puedan saborear el buen gusto de la repostería que les ofrezco”, explicó Aguilar.Al comenzar el negocio, Angelina se esmeró mucho en crear recetas únicas en cada uno de los productos de la repostería; dicha tarea valió mucho la pena, ya que desde el inicio la repostería fue todo un éxito, en el cual la gran afluencia de personas nunca ha parado de llegar hasta lo que es en la actualidad.
Entre la variedad de productos que la repostería ofrece se destacan: la torta de queso, quequitos, galletas, pasteles para toda ocasión u otros tipos de pan dulce; sin dejar atrás el famoso café de palo que es principal acompañante para degustar las tortas o pasteles.
“En la repostería no se produce mucho pan, pero sí un pan dulce fresco y de buena calidad que llena las expectativas de los clientes”, manifestó la propietaria.
Tips del éxito
- Unión familiar. Al crear un negocio familiar se debe contar con una excelente comunicación, ya que de lo contrario esto solo traerá conflictos y el fracaso del negocio.
- Atención al cliente. Todo negocio se debe a la clientela, es por ello que siempre hay que brindarles una atención de calidad, con el fin de hacerlos sentir en casa dentro del establecimiento.
- Productos de calidad. El hecho de tener una buena clientela, no quiere decir que hay que descuidar la calidad de lo que se ofrece, ya que el sabor es lo que hace destacar a un negocio de comidas.
- Precios accesibles. La gente siempre busca productos baratos o a precios cómodos que se ajusten a su bolsillo.
- Ubicación. Este también ha sido punto clave para atraer a mucha más clientela, ya que en la zona del barrio Abajo se encuentran muchas oficinas o empresas, que siempre buscan un tiempo para poder disfrutar de un rico café acompañado de un pan dulce.
Desde tempranas horas de la mañana hasta el final de la tarde, la repostería El buen gusto se ha convertido en la agenda diaria de muchos capitalinos, que no pierden la oportunidad de visitar diariamente este establecimiento que brinda un ambiente acogedor.
No deje de visitar la repostería El buen gusto, que se encuentra ubicado en el barrio Abajo, esquina opuesta después del Hoyo de Merriam.