El avance del auto eléctrico como opción real de movilidad motorizada es imparable. Lo demuestra el hecho de que, poco a poco, vaya venciendo los grandes obstáculos por los que no terminaba de convencer a muchos escépticos.
La última gran barrera en ser derribada es su precio, que está cayendo progresivamente según avanzan sus generaciones.
Cada vez tienen una mayor autonomía. Por otro lado, la apuesta a nivel público y privado por el auto eléctrico es palpable en la proliferación de cada vez más puntos de recarga en calles y carreteras en varios países.
En la actualidad las nuevas generaciones se abaratan, el último en hacerlo fue General Motors, que recientemente anunció una considerable rebaja en el precio de la próxima generación de su auto eléctrico de autonomía extendida Chevrolet Volt.
Según anunció el gigante con sede en Detroit, el que fuera Coche del Año en 2012 recibirá una mejora con un restyling a partir del año que viene. Pero no es el único en abaratarse, el eléctrico Nissan Leaf también recibirá un notorio descuento en su próxima versión respecto al actual.
Otro modelo en sumar al abaratamiento de estos vehículos en los últimos meses fue el pequeño Renault Zoe.
Incluso el eléctrico premium por excelencia, el afamado Model S, que puede adquirirse desde poco más de 42,000 euros también quiere moverse dentro de esta tendencia de rebaja de precios.
Lo que se espera
Aún con todo, la oferta de autos eléctricos sigue estando muy por encima en precios de los que pueden ser sus competidores en el segmento con motores de gasolina o diésel, de modo que solo cabe esperar que la investigación y el desarrollo del automóvil movido por electricidad vayan reduciendo progresivamente sus costes de producción y, de paso, acaben dando con una más numerosa competencia que contribuya a la rebaja de precios.