A falta de playa, la ventana es una buena opción. Al menos así debió pensarlo una joven residente en Austria que propició un verdadero caos en el tráfico de la ciudad.
Ante los rayos de sol, la estudiante se atrevió a aproximarse a la ventana de su dormitorio, dejando incluso sobresalir sus piernas. Todo ello, sin ningún tipo de bikini que le pudiese dejar marcas.
La imagen llamó la atención de todos los vecinos de los edificios de su alrededor, pero también de los conductores que vieron como la figura de la joven asomaba por la ventana.
Ese tiempo que invirtieron en admirar a la estudiante austriaca mientras se bronceaba provocó más de un accidente.
Los percances provocaron que la policía se desplazase al lugar, aunque tal y como recoge el diario Daily Mail, la chica ya había abandonado la ventana.