Tegucigalpa, Honduras.- El sur de Francisco Morazán dejó atrás décadas de abandono con la inauguración de un tramo de 15 kilómetros de carretera que conecta Reitoca y Curarén, ahora pavimentado con concreto hidráulico.
La obra fue entregada oficialmente el jueves por la presidenta Xiomara Castro en un acto celebrado en Reitoca, municipio históricamente afectado por el mal estado de sus vías. La inversión ascendió a 261.9 millones de lempiras, según información oficial.
El tramo conecta específicamente las zonas del Portillo del Lobo, Reitoca y Curarén, tres zonas rurales cuyas rutas de tierra que se volvían intransitables con la lluvia.

El nuevo corredor fue construido con concreto hidráulico, un material de alta durabilidad, que garantiza una vida útil de más de 20 años si se le da mantenimiento adecuado.
“Este es un triunfo del pueblo. Aquí no hay cálculo político, aquí hay dignidad”, expresó la mandataria, quien recordó que esta carretera fue gestión de la diputada Hortensia Zelaya, conocida como “La Pichu”.
Durante la ceremonia, habitantes de las comunidades beneficiadas estuvieron presentes en la inauguración. Muchos destacaron que la nueva carretera reducirá tiempos de traslado y facilitará el comercio, así como el acceso a servicios esenciales como salud y educación.
“Los impuestos que ustedes pagan están traducidos en obras palpables que ustedes ven y las pueden tocar”, señaló Castro.

Durante el acto, la presidenta no evitó lanzar críticas a gobiernos anteriores, a los que acusó de no invertir en zonas con poca densidad electoral.
“Los miopes no lo quieren ver porque les da vergüenza que una mujer les haya enseñado cómo se gobierna con dignidad”, dijo.
Para muchas familias rurales, esta obra representa una mejora tangible en su calidad de vida. Bajo el fuerte sol del mediodía, varios pobladores recorrieron el nuevo tramo con satisfacción, al ver cumplida una promesa de años.