La familia capitalina más popular salió a buscar su identidad y la encontró.
Ayer, en un acto especial en el marco de la VII Recreovía por la Paz, el grupo de mojigangas quedó constituida como la familia Pérez-López.
Vecinos del municipio del Distrito Central; los cinco miembros son hijos legítimos de los señores: Secretaría de Cultura, Artes y Deportes (SCAD) y del Departamento del Folclor Nacional, quienes asumen su responsabilidad de su manutención y educación.
Íconos de tradición
De acuerdo a las partidas de nacimiento que ayer les fueron extendidas con los nombres seleccionados por los lectores de EL HERALDO, la familia de mojigangas o mascarones quedó registrada de la siguiente manera:
La abuela: doña Pacita Ramírez, viuda de López; el papá, Pedro López; la mamá, Consuelo Pérez; y los hijos Pedrito y Esperanza Pérez López.
Todos muy felices recibieron su documento de identidad de manos de Henry Mancías.
Además, para fortalecer la unidad familiar y en ocasión del mes que hace honor a ella, don Pedro y doña Consuelo contrajeron nupcias y así lo hace constar la respectiva acta matrimonial.
“Estos nombres reflejan parte de nuestra identidad, historia y realidad nacional, recordando que la unidad familiar es la primera trinchera de lucha para formar grandes sociedades y las mojigangas representan eso”, manifestó Tulio Mariano Gonzales, ministro de la SCAD.
El grupo de mojigangas, es decir la familia López -Pérez, se ha hecho tan popular en cada Recreovía de Paz, ya que ponen entusiasmo y el toque especial en cada recorrido.
Ayer no fue la excepción. Los integrantes llenaron de color el evento que busca demostrar que esta capital es un lugar digno para vivir.
Desde el redondel de Los Artesanos en la colonia Palmira, hasta el centro histórico, las familias capitalinas recordaron los mejores años de sus vidas jugando trompo, mables, a la cuerda y bicicleta, entre otros tradicionales juegos.
Además, recorrieron la ruta acompañada de la banda del instituto José Cecilio del Valle.
