Tegucigalpa, Hondura.- Capitalinos denuncian que la Plaza Los Dolores en el centro de Tegucigalpa se ha agudizado la inseguridad ante la elevada presencia de personas en situación de calle.
El temor es mayor a posibles asaltos en el lugar, debido a que jóvenes, adultos y hasta niños permanecen día y noche ingiriendo sustancias como tíner, alcohol, pegamentos y otras.
Bajo la estatua de San Miguel Arcángel, el santo patrono de Tegucigalpa, los indigentes han acumulado colchones viejos, ropa regada y cartones rotos sobre y debajo de las bancas, lo que les sirve de refugio.
Desde hace varios semana, los capitalinos que transitan por la zona aseguran sentirse inseguros al cruzar por la plaza. El temor de ser asaltados o agredidos por algunos de los ocupantes ha generado malestar entre empleados del centro y ciudadanos que caminan a diario por el sector.
“Uno ya no puede pasar tranquilo. Hay hombres tirados todo el día, algunos piden dinero de forma agresiva y otros solo están dormidos, pero da miedo”, relató doña Gloria, quien se dirigía al Seguro Social del Barrio Abajo.
EL HERALDO constató que personas en situación de calle se mantienen en la zona, y muchos ciudadanos evitan pasar cerca por temor a cualquier situación que pueda ocurrir, principalmente en horas de la tarde-noche.
Según testimonios recogidos por este rotativo, varios de los indigentes que ahora ocupan la Plaza Los Dolores son los mismos que fueron desalojados del conocido “Hoyo Merriam”, ubicado en la misma centro de Tegucigalpa. Sin embargo, tras su salida de ese sitio, simplemente se trasladaron a otro espacio sin recibir atención integral por parte de las autoridades.
“Los movieron de un lugar, pero no les dieron ninguna solución. Ahora están aquí, y es lo mismo o peor porque es donde pasa más gente”, expresó un joven vendedor de la zona.
Este fenómeno no se limita a la Plaza Los Dolores. Los puentes a desnivel, las cercanías del Hospital Escuela y otras plazas públicas de Tegucigalpa y Comayagüela también han sido ocupados por personas en situación de calle.
Aunque el tema ha sido denunciado en múltiples ocasiones, las autoridades han dado pocas respuestas y no han presentado un plan claro para atender la situación de indigencia de manera estructural, con apoyo psicológico, médico y social, mucho menos una estrategia de reintegración o albergue permanente.
La Plaza Los Dolores es uno de los centros atractivos para turistas que disfrutan de la historia y las raíces culturales de la ciudad, ya que es una de las plazas más antiguas, donde debería impulsarse el turismo urbano.
Flagelo
Algunos ciudadanos reclaman mayor presencia policial, pero otros exigen una solución humana y sostenida para quienes han caído en la indigencia y requieren mucho más que un simple desalojo.
“La inseguridad crece cuando hay abandono, pero también hay que pensar que estas personas están en condiciones críticas. No basta con sacarlos de la vista, hay que atenderlos con dignidad”, opinó Nelson López, quien muchas veces reparte comida a estas personas.
EL HERALDO intentó comunicarse con la Gerencia de Desarrollo Humano de la Alcaldía Municipal para conocer las acciones de control de la situación, sin embargo, al momento de esta publicación no se obtuvo respuesta.