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Tegucigalpa, Honduras.- Un enorme socavón dentro de las instalaciones de un taller en el barrio Buenos Aires representa un peligro latente para residentes y transeúntes, debido a su constante expansión y la falta de intervención por parte de las autoridades municipales.
“Tenemos más de un año de pedir ayuda a la Alcaldía para solventar este problema, pero no nos escuchan. Estamos en riesgo de inundaciones”, denunció uno de los vecinos afectados, quien asegura que cada lluvia agrava la situación.
Desde mayo del 2024, los pobladores enviaron solicitudes formales a la Alcaldía Municipal para que se inspeccionara y reparara el socavón. No obstante, hasta ahora no han recibido respuesta oficial.
“Desde el 21 de mayo del 2024 nosotros solicitamos ayuda al Comité de Emergencias Municipales, pero realmente no nos escuchan”, lamentó Jancarlos Lanza, quien labora en el taller donde se encuentra el gigantesco agujero.
El afectado explicó que en cada tormenta fuerte, la zona se inunda por completo afectando gravemente el taller donde trabaja y poniendo en riesgo la integridad de las personas que circulan cerca del sitio.
El socavón continúa creciendo con el paso de los días. De acuerdo con los vecinos, el problema se origina en un embaulamiento subterráneo que lleva años deteriorándose, sin que se le haya dado mantenimiento por parte de la municipalidad.
Otra situación que agrava el problema es la cantidad de basura que es arrastrada por las corrientes de agua y que termina dentro del tragante, lo que bloquea el paso del agua y genera más daños en la estructura del embaulado.
Los vecinos también hacen un llamado urgente a la Gerencia de Obras Civiles de la Alcaldía Municipal para que se acerquen al lugar y den una solución. Temen que, si no se actúa pronto, el embaulado colapse completamente.
En mayo del 2024, EL HERALDO reportó por primera vez el peligro que representaba el socavón. Un año después, los afectados aseguran que no han recibido ninguna respuesta formal, y esperan que esta nueva denuncia genere acciones inmediatas.
Este enorme agujero está ubicado dentro del local que funciona como taller, en el barrio Buenos Aires, específicamente en la calle Las Minas, una cuadra antes de llegar a la papelería Quiñones. La comunidad sigue a la espera de una solución concreta.
