La mujer ha sido el complemento del hombre desde el momento de la creación, como tal posee cualidades diferentes que la destacan en gran medida de los hombres, pero en la historia de la humanidad, la mujer fue dejada de lado por los hombres, el cual la relegó solamente al cuidado de los niños y del hogar, por eso desde tiempo inmemoriales la mujer fue siendo moldeada en una sociedad machista donde se le negaban muchas posibilidades de ser reconocida.
Son varios los argumentos que se plantean las mujeres modernas hoy día con los que pretenden alcanzar el mismo o un mayor éxito que los caballeros. Los cambios vertiginosos en las costumbres tradicionales han permitido que las mujeres a partir desde una corta edad deseen cada vez más, inclusive más que los hombres.
“La mujer moderna es un modelo a seguir y conoce su propio valor y propósito. Ella mantiene un equilibrio en la vida entre la religión, la familia, la salud y la vida laboral”, explica la psicóloga Gabriela Ordóñez.
“En la actualidad se puede ver en la mujer aires de autosuperación y de autosustentación. La mujer moderna ya no se queda solamente en casa encargándose de la limpieza del hogar y atendiendo exclusivamente a las exigencias de su esposo. Por primera vez en la historia las mujeres llevan las riendas de su vida y al igual que los hombres ocupan importantes cargos en empresas y el estado”, explica la experta.
Lidiando con la vida cotidiana
Las mujeres modernas han aprendido a manejar las diferentes situaciones que se enfrentan a diario, ejemplo de ello es el cambio de estado civil. Es común que cuando hay cambios en la vida sentimental de una mujer, su nivel económico disminuye (en ocasiones drásticamente), en muchos casos ellas se convierten en la única fuente de ingresos, en otros, ante una separación, el ex cónyuge debe mantener dos casas con un mismo sueldo.
Entonces la necesidad de conseguir empleo es urgente, si se quiere mantener el nivel de vida que implica que sus hijos estudien en los mismos colegios y el cumplimiento de necesidades básicas.
No es necesario para ser una mujer moderna, que elijas entre ser madre o emprendedora, con organización y las metas claras podrás llevar a cabo ambos papeles. Recuerda que la vida no se trata solo de alcanzar éxitos profesionales, también se trata de llegar a la cima personal planteando una vida activa, llena de alegrías en todos los aspectos, ya sea como madre, hija, esposa y amiga.
No mueras en el intento
A pesar de los contratiempos y las exigencias del mundo moderno, nadie puede negar que ser madre le brinda a la mujer una satisfacción personal que no tiene límites ni palabras para describirse. Por eso, para realizar tremenda tarea y no morir en el intento, aquí van algunos consejitos que pueden ayudarte a salir adelante y a disminuir el estrés que provocan tantas obligaciones:
1.
Evita el multitasking o hacer múltiples cosas a la vez. Concéntrate en completar una sola tarea de forma eficaz.
2.
Tómate un respiro: como mínimo 3 veces al día donde paras ‘toda’ actividad, te sientas y no haces nada durante 5 minutos.
3.
Reserva un espacio para mimarte, es decir, tiempo para ti, sin niños y sin remordimientos.
4.
Sal con tu pareja como mínimo cada dos semanas y deja una noche por semana para ponerse al día.
5.
Escucha música relajante o que te pongan de buen ánimo.
6.
Únete con otras madres que tengan hijos y lleven tu mismo estilo de vida, asi toman un respiro para todas.
7.
Apóyate en la familia. Pide ayuda a tus padres para que cuiden a los niños un par de horas al mes.
8.
No uses el poco tiempo que tienes en ver la televisión a no ser que sean series cortas y divertidas para desintoxicarte y reírte un poco (la risa sigue siendo una de las mejores terapias contra el estrés y sobre todo parar las frustraciones).
9.
Sal de casa con o sin niños, el aire fresco cae bien a toda la familia.
10. No pierdas el tiempo o tu dinero en centros comerciales o yendo de compras, es de lo más estresante aunque en ese momento no te lo parezca.
Exprésate cuando tengas que hacerlo y defiéndete
Mantente educada
Ser culta no solo te da las habilidades y conocimientos que necesitas para seguir tu carrera, sino también te hace ser más respetada por la gente. Tu nivel de educación (formal o informal) refleja tu inteligencia y les muestra a los demás que te preocupas por otras cosas, además de tu vida personal.
Haz valer tu opinión
No importa que edad tengas, tienes que aprender a valerte por ti misma en el mundo real, si quieres evitar que se aprovechen de ti. Debes aprender a defenderte en la escuela, en el trabajo y en tu vida social.
Cuida tu cuerpo, no solo por estética, también por autoestima
La fuerza personal se manifiesta física, mental y emocionalmente. Si quieres ser una mujer fuerte e independiente, no necesitas ver más allá de tu propio cuerpo. Haz ejercicio una hora todos los días. No tienes que ser una campeona olímpica para estar en forma. Sal a correr por el barrio, lleva a tu perro a dar un paseo, o ve a montar en bicicleta. Mantenerte en forma mejora tu salud en general, tu estado de ánimo y tus niveles de energía, lo que mejorará tu rendimiento en todos los aspectos de tu vida.