Columnistas

El cambio climático global y el agua

Uno de los problemas que amenaza hoy en día a nuestro planeta es el fenómeno del cambio climático global. Las actividades humanas, nuestro sistema económico y manera de vivir están produciendo más y más gases que están impactando la atmósfera, lo que está causando que la temperatura promedio del planeta suba constantemente con consecuencias desastrosas para los seres humanos.

La Convención Marco de la Naciones Unidas sobre el Cambio Climático lo define como un cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera y que se suma a la variabilidad natural del clima. Un informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, auspiciado por las Naciones Unidas, publicado en octubre de 2013 enuncia: “El calentamiento del sistema climático es inequívoco, y desde la década de los cincuenta, muchos de los cambios observados no tienen precedentes en decenas de miles de años. La atmósfera y los océanos se han calentado, las cantidades de hielo y nieve han disminuido, el nivel del mar ha aumentado y las concentraciones de los gases de efecto invernadero han aumentado.”

Pero el cambio climático se refiere a cambios del sistema climático durante periodos largos de tiempo, independientemente de su causa. Por consiguiente, las fluctuaciones durante periodos más cortos que unas cuantas décadas, como el conocido fenómeno de El Niño, no representan un cambio climático.

Las temperaturas en la Tierra son aptas para la vida gracias a un proceso natural llamado efecto invernadero. Cuando la radiación solar llega a nuestra atmósfera, una parte es lanzada al espacio y otra es absorbida por la Tierra, lo que causa que la superficie de la Tierra se caliente. El calor es irradiado hacia el exterior y es absorbido por los gases presentes en la atmósfera de la Tierra, los llamados “gases de efecto invernadero”. Este proceso evita que el calor desaparezca, haciendo que la temperatura oscile a partir de +15°C en vez de -19°C.

Hay muchos gases de efecto invernadero producidos por los seres humanos responsables de un calentamiento adicional de la atmósfera. La mayoría proviene de la combustión de combustibles fósiles de los coches, de las fábricas y de la producción de electricidad, óxidos nitros de los fertilizantes, los gases usados por la refrigeración y procesos industriales y la pérdida de bosques. El gas responsable de la mayoría del calentamiento es el dióxido de carbono, también llamado CO2.

Es claro que Honduras está y, de no tomar medidas, seguirá siendo afectada por el calentamiento global. Todos los años vivimos la terrible experiencia de los incendios de los bosques, la tala indiscriminada y sin control de los árboles, la destrucción de zonas boscosas para la construcción de edificios y viviendas. Los efectos los estamos viviendo, como ser la escasez de agua con sus efectos sobre la agricultura, los ríos otrora caudalosos son ahora pequeños manantiales y las altas temperaturas que afectan a la mayoría de las ciudades y poblados del país.

Todavía es tiempo de cobrar conciencia y de actuar así como de exigir a los gobiernos que adopten las medidas necesarias para preservar nuestro hábitat antes de que sea demasiado tarde. Recordemos que el agua es vida.