En cuanto a la tarea crítica de la educación inclusiva, en realidad todavía estamos ante un fracaso sistémico, pero para cambiar esto hay que vivir en democracia. Me remito a lo que el sociólogo francés Alain Touraine nos plantea en su libro “¿Podremos vivir juntos?”, y dice: “Si quieres encontrar una medida del espíritu de una sociedad, fíjate en su sistema educativo, eso te dirá si una sociedad es justa, pero también dice que si queremos aprender a vivir juntos solo lo podremos hacer a través de una democracia y una educación sobre democracia”.
Por eso pienso que la inclusión es en el fondo una herramienta para construir democracia. Uno de los requisitos de la democracia es que la gente está incluida, que su voz se escuche. O sea que incluir estudiantes con diferencias de todo tipo es una forma de asegurar que la educación que reciben es un aprendizaje sobre democracia. En unos tiempos en donde la democracia está en peligro, donde crece la exclusión, la educación inclusiva es extremadamente importante. Hay que pensar en la educación de hoy para mañana, hay que pensar nuevos espacios, en la búsqueda de la búsqueda a servir y atender a todos como colectivo y a cada uno como singularidad. Es absolutamente imperativo categórico una educación inclusiva como eje de una transformación, de estructuras lineales, cerradas que no se evidencian en un solo enfoque. El cambio estructural de la política nos hace re-pensar que la educación debe abrirse a nuevas propuestas pedagógicas; que no se definen con un simple modelo de resultado de “medición”, sino con un constante ajuste y desajuste en su proceso evolutivo de aprendizaje. En nuestro escenario generalmente utilizamos términos (basados en diccionario), pero no consideramos la episteme de cada concepto, por ello, considero que los que se dedican al campo educativo deberían retomar dicha palabra con su significado para apartar de lo retórico y movilizar el cambio, en nuestros saberes y hacerles, que hoy necesitamos modificar del doble discurso. En lo particular, aparte de ampliar mi equipaje de conocimiento, me ha permitido modificar mi manera de ver y abordar a la inclusión y que el día a día sea con práctica inclusiva. Gracias a todos por permitirme analizar y reflexionar en nuestra Honduras.