Miembros del sindicato del hospital Escuela hicieron un llamado a la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) para que investigue el robo del inyector de un tomógrafo.
Según José Girón, secretario general del centro, la pieza del tomógrafo fue sustraída sin haberse puesto a funcionar el aparato.
Girón explicó que este tomógrafo fue adquirido con un préstamo del gobierno de Bélgica.
El inyector que fue robado es una pieza fundamental para la operación del tomógrafo y tiene un alto costo.
Por su parte, Roberto Esquivel, director del hospital Escuela, informó que las investigaciones de este robo iniciaron en noviembre del año pasado.
“En noviembre del 2012 se sustrajo una pieza de uno de los dos tomógrafos que ha comprado el hospital, esto ya está en la fase final de investigación por parte de la DNIC”, manifestó Esquivel.
“Aparentemente los responsables no son empleados del hospital, aunque hay que esperar el informe final”, señaló.
Esquivel aseguró que el tomógrafo que se pondrá a funcionar en los próximos días está completo y servirá para atender la gran demanda de tomografías que tiene el hospital Escuela.
El tomógrafo se utiliza para observar casi todo el cuerpo humano, incluyendo cabeza, espina dorsal, tronco, abdomen, brazos y piernas para detectar tumores, obstrucciones y cualquier enfermedad.