Tegucigalpa, Honduras.- Un ciudadano estadounidense que era buscado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), fue capturado en nuestro país y luego enviado a prisión por decisión de un juez natural.
Se trata de Roscoe Silvestre McMillan, de 44 años de edad, quien compareció este día en audiencia de información, como parte del proceso judicial, al ser solicitado en extradición por su país de origen, es decir, Estados Unidos.
Luego de que el jurista le leyó sus derechos y los cargos por los que la justicia de los Estados Unidos le acusa, le dictó arresto provisional a Roscoe Silvestre McMillan.
Carlos Silva, portavoz del Poder Judicial (PJ), informó que el imputado "es solicitado por la Fiscalía del Distrito Norte del Estado de Georgia, en Estados Unidos. Es acusado de tres delitos: fraude electrónico, fraude postal y no comparecer ante juez competente".
El actuar delictivo
La justicia estadounidense investiga a Roscoe Silvestre, por que este habría creado una empresa y contratado personal que no realizaba ninguna labor.
Posteriormente estas personas supuestamente se hacían pasar como fallecidos y él, tratando de burlar la ley, cobró a varias empresas aseguradoras un total de dos millones setecientos mil dólares, en el Estado de Georgia.
Silva detalló que "el señor Silvestre, a través de su equipo de defensa pública, ha manifestado allanarse en el proceso y no está presentando medios de prueba y no presentara recursos de apelación ante el pleno de magistrados de la Corte Suprema de Justicia".
Él ha indicado que acepta la solicitud de extradición y que lo que quiere y pretende es presentarse ante el tribunal que lo solicita en Georgia, para tratar de desvirtuar las acusaciones.
El arresto provisional deberá cumplirlo en la Penitenciaría Nacional de Támara. La audiencia de presentación y evacuación de medios de prueba se desarrollará el 23 de junio próximo, a las 10:00 de la mañana.
Captura
McMillan fue capturado el 31 de diciembre de 2024, por agentes de la Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos (DNSPF), en el Punto de Control Interno ubicado en Pavana, Choluteca.
Su detención se dio por sospechas del delito de lavado de activos, en perjuicio de la economía del Estado de Honduras, ya que llevaba consigo 29,900 dólares en efectivo, de los que no supo justificar su procedencia.
El 3 de junio del presente año, mediante audiencia de procedimiento abreviado, el Juzgado de Letras con Competencia Nacional en Materia de Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y Corrupción, resolvió declarar con lugar la suspensión condicional de la ejecución de la pena de prisión, para que se ejecute el proceso de extradición a los Estados Unidos