El ministro de Seguridad, Pompeyo Bonilla, aseguró este viernes que los cambios en la Policía Nacional de Honduras se analizaron desde el mes de diciembre, pero aún faltan 'mínimos cambios'.
Los movimientos en los mandos intermedios de la Policía se oficalizaron tres días después de la muerte Óscar Roberto Ramírez, el hijo de Ricardo Ramírez del Cid, exdirector de la Policía Nacional.
Luego de este hecho, que conmocionó a la sociedad hondureña, Ramírez del Cid ha criticado fuertemente a la institución policial y militar, especialmente algunos cambios que considera que pueden afectar la investigación
del crimen de su hijo.
Esta mañana en el programa Frente a Frente, el exdirector policial pidió a Bonilla, la destitución de Juan Carlos Bonilla
y que se inicie una investigación en su contra.
No obstante, Bonilla explicó 'el proceso de rotaciones se venía analizando desde finales del mes de diciembre y ya estaba en proceso antes de los acontecimientos del asesinato del hijo del exdirector de la Policía, Ricardo Ramírez del Cid, porque tienen que ver con la transformación de la institución'.
Agregó que hay molestia por alguno cambios, como del subcomisionado Leonel Sauceda, quien se desempeñaba como jefe de la Metropolitana 2 de San Pedro Sula y ahora será el Director de la Academia Nacional de Policía (Anapo).
En ese sentido, explicó que Sauceda estaba desarrollando un buen trabajo en San Pedro Sula, pero por su experiencia, trayactoria limpia y buenas ejecutorias, se dispusó que dirija a las personas que en el futuro serán los dirrectores de la institución policial.
Bonilla anunció que aún hay unos 'mínimos cambios' más que se realizarán en los próximos días, pero el 98 por ciento ya está ejecutado.
Al ser consultado de su salida de la Secretaría, Bonilla comentó que por la mañana habló con el presidente Porfirio Lobo, pero que continúa en sus actividades normales, aunque desde fin de año dejó su cargo a disposición y solo el mandatario tiene la potestad de nombrar o remover un funcionario.
'Soy una persona con la suficiente edad para entender que si se tiene que tomar una decisión en beneficio de los intereses del Estado, estamos para acatarla, con la conciencia tranquila que se está haciendo el trabajo que corresponde, aunque entiendo los vaivenes de la vida', señaló.
Del crimen de Óscar Roberto Ramírez, expresó que está preocupado, pero se está investigando para dar resultados, 'porque la sociedad hondureña ya no puede estar escuchando que tenemos a los autores materiales pero que no capturamos ni le damos seguimiento a los autores intelectuales de estos horrendos crímenes'.
Bonilla reiteró que se está trabajando por dar seguridad a la población, que no se logra de la noche a la mañana, aunque se han bajado la curva ascendente de homicidios por cada 100 mil habitantes, porque estaba en números escándalosos.
Agregó que no se logró el objetivo de bajar los cinco o seis puntos en la cantidad de muertes violentas, pero por circunstancias se evitó cumplir con estas proyecciones.