Tegucigalpa, Honduras.- “Esta película no mira al pasado ni a la muerte, sino al presente,” afirma el director brasileño Gabriel Mascaro al presentar O Último Azul (“El último azul”, en español), una obra que combina sensibilidad, ingenio y crítica social, enfocándose en la vitalidad que aún habita en los cuerpos maduros. Su cámara resalta la esperanza y el deseo, redefiniendo la experiencia de envejecer como un acto de libertad y descubrimiento.
Reconocida con el Oso de Plata en la Berlinale y aclamada en más de 80 festivales internacionales, la película narra la historia de una mujer de 77 años (Denise Weinberg) que se rebela contra un Estado que pretende confinarla. En ese gesto, Mascaro traza una parábola sobre la libertad y la dignidad del cuerpo envejecido.
A propósito de su estreno el 13 de noviembre en las salas de Metrocinemas —Novacentro, Tegucigalpa—, EL HERALDO conversó con el cineasta sobre la génesis de esta historia, la interpretación de Weinberg y la mirada esperanzadora que el filme propone ante el paso del tiempo. A continuación, la entrevista.
¿Cómo ha evolucionado su mirada como cineasta desde Neon Bull (2016) o “Divino amor” (2019) hasta O Último Azul?
Es un poco desafiante y difícil para mí mismo hablar de mi trayectoria, pero en esta película hubo algo muy importante, un acontecimiento muy personal vinculado a mi abuela. Crecí con mis abuelos, cerca de personas mayores que me influenciaron muchísimo en la manera en que quise investigar este tema.
Denise Weinberg es una actriz mayor que asume con orgullo su envejecimiento. ¿Qué aportó al resultado de la película?
Ella es muy talentosa y especial. En Brasil, la primera generación de mujeres mayores del mainstream televisivo tuvo que recurrir a procedimientos y cirugías faciales para esconder la vejez. Por suerte encontré a esta actriz que tiene orgullo de sus arrugas. Para ella, son una herramienta de creación.
Antes mencionó que la película combina elementos de distopía y utopía. ¿Cómo conviven esas dos ideas en la historia?
Es una película con mucha luminosidad, tiene una utopía. Cuando empecé a investigar, descubrí que hay poquísimas películas con protagonistas mayores. Y cuando existen, suelen tratar la finitud, la muerte o la nostalgia del pasado. Lo especial aquí es que no mira ni al pasado ni a la muerte, sino al presente.
También nos hablaba del místico caracol de baba azul. Cuénteme sobre el rol de los animales y elementos naturales en su cine.
La Amazonia es conocida por sus encantos. Hay muchos elementos psicotrópicos en su fauna y flora. En esta película creamos una alegoría para hablar de la utopía y la fantasía. Cuando pones una gotita de la babosa azul del caracol en los ojos, eres capaz de mirar el futuro y abrir caminos.
Es muy especial jugar con esa idea de un psicotrópico que genera una mirada hacia el futuro y empodera a esta mujer mayor, que dentro de la película lo usa a su favor cuando lo necesita.
¿Cómo fue trabajar con actores amazónicos y figuras reconocidas como Rodrigo Santoro?
Fue muy especial conectarnos con la región donde filmamos, en el estado de Amazonas, cerca de Manaos. Descubrimos actores y actrices excelentes, con una fuerte tradición teatral, pero con pocas oportunidades.
Ganar el Oso de Plata en la Berlinale y tener esa presencia internacional, ¿qué significa para usted y para el cine brasileño?
Una alegría muy grande. Este año Latinoamérica, a través del cine brasileño, estuvo muy representada en el Oscar. Empezamos el año con mucha energía, y ganar el Oso de Plata en Berlín fue una confirmación de nuestra fuerza y un motivo de orgullo enorme.
¿Qué espera que el público hondureño descubra o sienta al encontrarse con su historia?
Espero que sientan que es una película hecha con mucha sinceridad, desde una mirada y un sentimiento muy personal que tuve con mi abuela. Un sentimiento de encantamiento, de creencia en la vida y en la posibilidad de redescubrirla sin importar la edad.
Tiene una utopía (de libertad). Independientemente de quiénes seamos o de nuestra edad, siempre es tiempo de quererse libre y descubrir la vida.
Tráiler oficial
.
