Mediante la aplicación de un 12% de Impuesto sobre Ventas (ISV) a los precios de la comida y de un 6% a las medicinas se elevaría la recaudación fiscal hasta en 4,000 millones de lempiras, según estimaron autoridades del sector privado.
El gobierno, de manera inicial, presentó ante la Comisión Especial que Revisa las Exoneraciones, Exenciones y Dispensas Aduaneras, un listado de 72 productos, que de manera paulatina se incrementó a 75.
El representante del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), ante esta comisión, Guillermo Matamoros, expresó que de acuerdo con un documento expuesto por la Secretaría de Finanzas, el impacto de elevar la recaudación fiscal sería de incrementar hasta un 1% la tasa de inflación.
Matamoros confirmó la publicación de EL HERALDO que el gobierno presenta seis escenarios para aplicar esta reforma que será presentada en los próximos días al presidente Porfirio Lobo, quien elevaría la reforma al Congreso Nacional para modificar el Impuesto sobre Ventas (ISV). El primer escenario, según Matamoros, implica fijar una canasta básica de 34 productos exonerada del pago del 12% Impuesto sobre Ventas (ISV) y fijar a todos los productos farmacéuticos con un 6% de impuesto.
Un segundo escenario contempla dejar a 75 productos de la canasta básica y gravar los medicamentos con un 6% de ISV. En este caso no se gravarán las importaciones de maíz amarillo, la soya y el trigo utilizado para preparar alimentos balanceados. Por esta medida se captarían unos 4,000 millones de lempiras por concepto de la aplicación del 12% de ISV, pero se dispararía la inflación hasta 1.24 %
Existe un tercer escenario en donde se determinan 78 productos, con una variante para los fármacos incorporados y una cuarta opción en donde se obvia gravar estos medicamentos.
En dos escenarios adicionales se le impone el 12% a la importación de la soya, el trigo y al maíz amarillo para alimentación animal. El análisis indica que gravar a las medicinas generará mínima inflación.