Marathón y Real de Minas serán los encargados del cortar la cinta de inauguración a las 3:00 de la tarde en el estadio Yankel Rosenthal de San Pedro Sula.
Los de Héctor Vargas le apostarán a su recinto y a su mejorado plantel para dar el primer golpe de autoridad, mientras que los Arcángeles llegan a duras penas: hasta la tarde del viernes les cancelaron una deuda de hace varios meses de salario.
Media hora más tarde ( 3:30) y siempre en la zona norte, Honduras de El Progreso recibirá al renovado Olimpia de Pedro Troglio en el Humberto Micheletti de El Progreso.
Los Arroceros, tras lograr la permanencia en primera división el pasado campeonato, lucharán por pelear por el título nacional como lo conquistaron por primera vez en 2015.
En el campamento blanco solo se piensa en una cosa: conquistar la ansiada copa 31, que hasta el momento se ha negado por más de tres años. La llegada de Michael Chirinos, más los extranjeros, prometen acabar de una vez por todos con el maleficio.
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Y el último encuentro de este día será entre Vida y Lobos de la UPNFM en el estadio Municipal de La Ceiba. Los Diablo Rojos, luego de superar una crisis financiera que venía agobiando al cuadro desde hace muchos años, pretenden hacer historia en la competencia nacional con varios refuerzos con buena hoja de vida.
En la Manada, camandada por Salomón Názar, la historia es la misma: superar los que hicieron en el torneo anterior, que fueron las semifinales.
Mañana
A las 3:30 de la tarde del domingo, dos realezas se verán las caras: Real Sociedad vs Real España en el Francisco Martínez Dubón de Tocoa.
Los Aceiteros, viejos conocidos, llegan como los benjamínes del Apertura con la mentalidad de dar la pelea como lo hicieron en años anteriores.
Para los Aurinegros, esta justa representa la oportunidad de ver los frutos del comienzo de un proceso que le apuesta a la juventud de la mano del entrenador tico, Hernán Medford.
Y Motagua, el bicampeón, cierra la jornada uno ante Platense en el Estadio Nacional de la capital hondureña a las 4:00 de la tarde. El conjunto de Diego Vazquez tiene una sola misión: obtener su tercer título consecutivo por primeta vez en su historia.
El Tiburón, por su parte, quiere dar el batacazo, como lo hizo en las vueltas regulares al vencer al Águila por la mínima diferencia con un solitario gol de Diego Reyes. ¿Habrá sorpresas en esta jornada?
