Muñequera rojo, amarillo y verde. Rasta de algunos días. Y dos goles a Japón en Francia 98.
Theodore Whitmore, él solo, hizo tantos goles como Honduras en dos mundiales y esta tarde llegará al país en busca de iniciar el milagro caribeño como DT de los Reggae Boyz; después de concentrarse en Miami, el sotanero del hexagonal se juega la vida en el Nacional...
“Es realmente difícil encontrar palabras para lo que vivimos ante EE UU”.
El Tappa Whitmore no sale de su asombro.
Perdió tres puntos en el descuento y el camino se le puso cuesta arriba al hombre que sustituyó al inglés John Barnes en junio de 2009, tras que el exjugador del Liverpool asumiera el puesto del Tranmere Rovers.
“Obviamente estamos decepcionados, pero esto es fútbol y ahora en Honduras debemos mantener una actitud positiva y esperar lo mejor”, sumó el DT nacido en Montego Bay.
En el último año, Theodore Whitmore se ha dedicado a convencer a varios futbolistas que participan en ligas de Inglaterra, Escocia o Irlanda para que se integren a la nacional jamaiquina.
El proceso parece haber elevado el rango de futbolistas a su disposición, pero la falta de cohesión podría estarle pasando factura en estos momentos.
Así, de Centroamérica Whitmore también podría salir sin trabajo.
Una derrota ya no sería soportada por la prensa local, que tras perder ante Estados Unidos bramó con titulares como “¡Sack the coaches!” (parafraseando las palabras del entrenador de la local Red Stripe Premier League Geoffrey Maxwell: “¡Saco los entrenadores!”); otros, como Andy Williams, el excompañero de Whitmore en la selección, prefiere que “para el resto del eliminatorio no debería de jugar ningún futbolista mayor de 24 años para ir pensando en Rusia 2018”.
Compromiso hasta el fin
Dentro del grupo, sin embargo, el Tappa sigue gozando de la confianza de sus dirigidos.
Como lo expresó Ryan Johnson, que posiblemente será el punta de lanza del esquema de Whitmore, acostumbrado a poblar el mediocampo en escenarios duros como el del martes: “Él (Whitmore) se preocupa. Todos nos preocupamos. La gente solo tiene que confiar en el entrenador, porque si tenemos éxito, entonces todos tendremos éxito”.
La esperanza final de Jamaica es, sin duda, llegar a la repesca ante el oceánico Nueva Zelanda, el mismo camino que ubicara a Trinidad y Tobago en el Mundial de Alemania 2006.
“Podemos ganar a equipos como Honduras, podemos derrotar a Panamá, podemos derrotar a Costa Rica”, escatimó Johnson; “ese es nuestro objetivo en los próximos partidos”, cerró el delantero.
