La tecnología ha cambiado la visión sombría del cáncer. Se estima que esta enfermedad cobra en el mundo alrededor de 7.8 a 8 millones de muertes al año (casi el total de la población hondureña), pero cada vez se avanza más hacia novedosos equipos médicos que brindan a los pacientes oncológicos una mejor calidad de vida, lo que ha llevado a que ya no se asocie al cáncer con una sentencia de muerte.
Sin embargo, el poco acceso a un tratamiento eficaz sigue siendo una limitante, sobre todo en países en vía de desarrollo.Recientemente, el Centro Internacional de Cáncer del Hospital de Diagnóstico, ubicado en San Salvador, El Salvador, adquirió dos equipos para el tratamiento del cáncer con la radioterapia y radiocirugía más avanzada del mundo.
Se trata de Tomoterapia Hi-Art y de Infini, un sistema de radiocirugía con rayos gamma rotatorio, esta última es la primera en instalarse en el continente americano. La Tomoterapia Hi-Art es una máquina que brinda radioterapia de la más alta precisión, actualmente solo la poseen dos países en América Latina. Pacientes provenientes de Honduras, Costa Rica, Colombia, Guatemala, Nicaragua, Ecuador, Bolivia, Palestina, México y Nueva Guinea reciben tratamiento en este centro.
La Tomoterapia Hi-Art ha revolucionado la radiocirugía por su capacidad de combinar varias modalidades de tratamiento, como radioterapia y radiocirugía en el mismo momento, lo que proporciona una ventaja para el tratamiento del cáncer, ya que esta técnica permite precisión y seguridad en el tratamiento del cáncer.
A diferencia de los equipos de anteriores generaciones, una de las grandes ventajas de la Tomoterapia Hi-Art es que permite la radiación de la zona específica en donde se encuentra un tumor canceroso, evitando dañar los tejidos sanos adyacentes.La otra tecnología es un sistema de radiocirugía con rayos gamma rotatorio, Infini; se trata de un aparato dedicado a la radiocirugía cerebral, técnica sumamente avanzada que permite la destrucción de un tumor o supresión de síntomas relacionados a epilepsia, párkinson, temblor esencial o dolor de cara (neuralgia del trigemino) sin incisiones, sin dolor y de manera ambulatoria.
'Tomoterapia e Infini son máquinas extremadamente precisas, lo que hacen es entregar una enorme cantidad de energía, esto nos ha permitido -en el caso de Tomoterapia, por ejemplo- hacer radiocirugía de próstata, mama, pulmón, hígado, etc., logrando la destrucción de la metástasis o del cáncer en esa zona', explicó el doctor Eduardo Lovo, neurocirujano oncólogo y director médico del Centro Internacional de Cáncer (CIC).
El galeno agregó que los tratamientos modernos del cáncer con radioterapia y máquinas avanzadas van dirigiéndose cada vez más al uso de radiocirugía, con esto se disminuiría el problema que ha tenido el manejo del cáncer en Latinoamérica, en donde la enfermedad es tratada con máquinas antiguas y de baja precisión.
Acceso a un tratamiento eficaz
Aproximadamente, del 10 al 11% de los pacientes que se han tratado anualmente son de fuera de El Salvador, de los cuales un gran porcentaje corresponde a hondureños.
Según el equipo médico del CIC debe haber una mayor accesibilidad a las altas tecnologías, porque se ha visto que en los últimos años estas han cambiado el paradigma en el tratamiento del cáncer.
'Antes, y hoy por hoy en Centroamérica, habían solo máquinas de cobalto; el cobalto es una máquina que tecnológicamente se ha quedado en el olvido y, literalmente, ya no debería utilizarse en oncología, porque sus efectos secundarios son tan grandes que no compensan los beneficios que tiene el paciente', explicó el doctor Víctor Caceros, oncólogo radioterapeuta.
Sin embargo, en cuanto a los efectos secundarios, la calidad de vida de un paciente tratado con esta tecnología obsoleta se reduce, lo que no sucede en el tratamiento con Tomoterapia e Infini.
El reto en Honduras
Honduras tiene todavía el reto de ir más allá en relación a la radiocirugía. Hacemos pininos de otras subespecialidades, pero no en radiocirugía, no en neurooncología.
Así lo expresó el doctor Rubén Paz, neurocirujano del Hospital Militar de Honduras, quien agregó que ve para largo que el país obtenga equipos como los de El Salvador.
'En Honduras se debe hacer mucho por la salud, El Salvador es referente para nosotros y nos demuestra que podemos seguir y ver más allá'.
Según el doctor Paz, en algunos centros a nivel nacional se emplean bombas de cobalto, cuyo cerco epidemiológico es grande, 'luego avanzamos hacia los aceleradores lineales y eso es lo importante, que estamos avanzando, no creo que nos estamos quedando atrás, yo diría solo que vamos más despacio', dijo, y destacó que Honduras debe imitar a nuestro vecino país e invertir en estos equipos de alta tecnología.
'Nuestro sistema de salud debe invertir y retomar la educación de nuestros pacientes para disminuir los índices de cáncer, si logramos educar a la gente lograremos que el cáncer disminuya', precisó.
En Honduras existen de ocho a diez equipos oncológicos entre aceleradores lineales y bombas de cobalto, lo que se podría traducir en una relación de una máquina por cada millón de personas, que es lo que recomienda la OMS, sin embargo, muchos de estos equipos se consideran obsoletos.
El camino queda libre para transitar hacia tecnologías más avanzadas como la adquirida en El Salvador y con ello garantizarle una mejor calidad de vida a los pacientes oncológicos.
Información
Si usted desea ponerse en contacto con el Centro Internacional de Cáncer del Hospital de Diagnóstico, El Salvador, llame a los números telefónicos: (503) 2528-2001 o 2506-2001. También puede visitar el sitio web: www.centrodecancer.com.sv.
Avances en el tratamiento del cáncer
Bomba de cobalto. La primera bomba de cobalto fue construida en Canadá y se experimentó en humanos en 1951. En medicina, la bomba de cobalto ha permitido tratar, a través de radiaciones ionizantes, diversos tipos de cáncer.
- Aceleradores lineales. Los aceleradores lineales tenían una ventaja sobre el cobalto: producían la energía directamente del equipo y podían, en algunos casos, profundizar hacia los tejidos ese nivel de energía. Esa fue una gran ventaja y por eso desplazó a los equipos de cobalto. Entre 1970 y 1980 los aceleradores lineales eran lo más moderno en tratamientos de radiación.
- Tomoterapia Hi-Art. Agrega la capacidad de variar la intensidad de radiación, reduciendo enormemente la exposición del tejido sano y abandona la tecnología basada en arcos para utilizar un avanzado sistema helicoidal con rotación continua de la fuente de radiación. Por su avanzada capacidad de localización y tratamiento exacto de las lesiones, la radiocirugía con Tomoterapia Hi-Art extiende su campo de acción a todo el cuerpo y no solo al cerebro, como la radiocirugía convencional.
- Equipo de rayos gamma rotatorio. El aparto Infini es el más avanzado del mundo para tratamientos de radiocirugía en la cabeza. Este equipo también se puede usar en lesiones no cancerosas.
Contacto
Información. Si usted desea ponerse en contacto con el Centro Internacional de Cáncer del Hospital de Diagnóstico, El Salvador, llame a los números telefónicos: (503) 2528-2001 o 2506-2001. También puede visitar el sitio web: www.centrodecancer.com.sv.