La Comisión Europea aprobó recientemente, con 550 votos a favor, 12 en contra y 8 abstenciones, una medida que obligará a que todos los
dispositivos móviles utilicen un cargador universal.
La norma está enmarcada en la Directiva sobre equipos radioeléctricos y equipos terminales de telecomunicación y obliga a que el puerto de alimentación de teléfonos, tablets y otros dispositivos sea a través de un micro-USB.
De esta manera, los fabricantes de móviles deberán estar adaptados a partir de 2017, cuando todos los cargadores deberán tener clavijas micro-USB.
Esta iniciativa se presentó hace años, no obstante empresas como Apple o Nokia han sido un obstáculo en el proceso al imponer clavijas con las que han querido marcar diferencias.
No obstante, la determinación de la Comisión Europea será positiva para los usuarios que desde hace años han clamado por una medida semejante.
