¿Por qué los diabéticos no pueden vengarse?
Porque la venganza es dulce...
Le dice una madre a su hijo:
- ¡Me ha dicho un pajarito que te drogas!
- ¡La que se droga eres tú que hablas con pajaritos!
¿Cómo se dice psicoanalista en japonés?
Sakudo Tukoko
Tía Teresa, ¿para qué te pintas?
- Para estar más guapa.
- ¿Y tarda mucho en hacer efecto?
Llega el niño de jugar al fútbol y le dice a su padre: – Hoy el entrenador me ha dicho que soy garantía de gol.
– ¡Qué bien! Siempre quise tener un hijo delantero.
– No, papá, jugué de portero.
Un señor llega al doctor con su bebe en brazos.
- Doctor, doctor, mi hijo tiene seis meses y no abre los ojos. El doctor le hace un chequeo al bebé y le dice al padre: Señor, el que debe abrir los ojos es usted, este bebé es chino.
- Cariño, ¿tengo la nariz grande?
- No, tienes una nariz común.
- ¿Ah, sí?
- Sí, ¡común tucán!
Saludo de un español a un chino:
¡Hola!
Y el chino le contesta: las doce y tleinta.
Se encuentran dos chinos:
-El otlo día me complé un coche nuevo.
-¿Ah sí?
-Si, mila, es ese de ahí.
-Y que malca es?
-Un Alfa
-¿Lomeo?
-Lo meas y te lompo el cuello, pol cochino.
-¿Quién es la persona que más se ríe?
-El barrendero, porque siempre va riendo.
- ¿Sabes que el jefe se ha muerto?
- Sí, pero quisiera saber quién fue el que falleció con él.
- ¿Por qué lo dices?
- ¿No leíste la nota de duelo que puso la empresa....
“...y con él se fue un gran trabajador...”
Va un señor a la comisaría y le dice el comisario:
- Señor comisario, vengo a denunciar la desaparición de mi esposa.
- ¡Muy bien, señor! El comisario pide todos los datos de la mujer y luego dice: ¿Tiene alguna foto?
- ¡Sí, señor, aquí tiene una!
La ve el comisario y le expresa:
- ¡Vaya! ¿De verdad quiere que la encontremos?
- Mi mujer me hizo creyente
- ¿Y eso?
- ¡Yo no creía en el infierno hasta que me casé con ella...!
Un cura en la iglesia dice:
- Hoy confesaré a todas las devotas.
Se levanta la rubia y pregunta:
- Y a las que vinimos en sandalias... ¿cuándo nos toca?
¿En que se parecen las bodas y los divorcios?
- Pues en el arroz. Por que cuando sales de la iglesia todo es arroz. Y cuando sales del juzgado todo es pa’ella!
