La alarma que mantienen aún los altos costos de la gasolina ha obligado al menos a 350 taxistas de la capital a emigrar al uso de gas licuado de petróleo.
Pedro Gómez, presidente de la Asociación Interdepartamental de Puntos de taxi (Aiterp), informó que el precio por litro de este tipo de carburante abarata los costos de operación hasta en un 50 por ciento.
Si bien es cierto, el cambio del uso de gasolina a LPG provoca una disminución en la fuerza del motor de un 20 por ciento, los ruleteros han optado por el ahorro en bomba que en la vida de sus vehículos.
Gómez indicó que en primera instancia son 500 taxis los que harán el cambio.
“El gobierno está haciendo los desembolsos correspondientes y esperamos que para noviembre hayamos concluido este proceso de cambio”, aseveró.
De acuerdo a los resultados, que hasta el momento se traducen en un ahorro en bomba, se gestionará ante el Estado la ampliación del proyecto a nivel nacional.
Solo en la capital hondureña, se registran 8,000 taxis.
