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'Me considero una persona de mecha corta'

Yo siempre he colaborado con el licenciado Miguel Pastor (precandidato presidencial del Partido Nacional), aspiro a una diputación en su movimiento

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18.08.2012

Con 40 centavos al día, que apenas le ajustaban para pagar la tarifa del bus, Roxana Araujo se movilizaba de su casa a la universidad y viceversa.

Así fueron aquellos tiempos, pero “no me da pena decirlo”, dice la doctora en medicina, porque el sacrificio le ayudó a forjarse como mejor profesional. A temprana edad, 20 años, recibió la bendición de ser madre, pero esto resultó una complicación para culminar su licenciatura.

Su obligaciones profesionales la distanciaron de su familia, al grado que le generaron un divorcio, pero 12 años después de la separación se reconcilió con su esposo y ahora ha vuelto a formar el hogar que una vez constituyó, según el relato de su historia que comparte con El HERALDO.

¿Cómo describe su infancia?
La infancia de nosotros estaba llena de un ambiente agradable y no recuerdo que en algún momento mi mamá o mi papá nos hayan reprendido de una forma que nos traumara. antes los papás solo nos miraban y ya entendíamos, esas son cosas que uno les agradece a sus padres porque le van moldeando el carácter y uno es así en la edad adulta.

Teníamos una persona como padre muy responsable, que se preocupaba por el bienestar de nosotros.

¿Tuvo un vínculo fuerte con su papá?
Los recuerdos más satisfactorios que tengo de él son que nosotros no nos íbamos a la escuela si no teníamos nuestros zapatos bien limpitos, bien “chinoleados”, como se decía antes, y los ponía todos (los zapatos) en fila.

Fue un hogar unido hasta cierto tiempo cuando mis padres decidieron separarse. Se separaron cuando yo tenía 12 años, fue una etapa difícil porque mi acercamiento con mi papá fue mucho.

De hecho, es una persona a la que siempre le ha gustado estudiar y recuerdo que cuando yo tenía como cinco años él llegaba por las tardes o por las noches a cenar, y lo primero que hacía era leer el periódico y yo muy cerca de él, entonces me empezaba a enseñar las palabras.

Claro, cuando se separaron todos pasamos por el trauma de la separación de los padres.

Mi padre estudiaba en el extranjero para sacar sus cursos, por lo general se iba uno, dos o tres meses, pero mi mamá es una persona sumamente dedicada a sus hijos; de hecho, yo tengo que agradecerle todo lo que soy hoy en parte a ella, que nunca nos abandonó, y lo más importante es que aún después de que yo me casé, ella vivía cerca de nosotros y me cuidaba a mis hijos.

¿Sufrió mucho con la muerte de su abuelo?
La parte más difícil fue cuando se muere mi abuelo materno, porque con él teníamos también una relación muy estrecha, inclusive las navidades íbamos a la casa de él a celebrarlas y cuando él muere fue una etapa dolorosa que perduró durante muchos años como un sentimiento de dolor en mi corazón.

Yo tenía 22 años, él murió de un infarto a las 5:30 de la mañana; era un hombre trabajador, se jubiló en una empresa privada, era de los hombres que se levantaban a las 4:30 de la mañana, tenía una diabetes crónica y eso lo llevó al infarto.

¿Cómo fue su adolescencia?
Yo creo que la etapa de la adolescencia fue mi mejor etapa, yo no me puedo quejar (ja, ja, ja, ja, ja); me casé muy joven, pero lo que fue desde ciclo común hasta bachillerato yo siempre traté de tener relaciones personales o interpersonales muy buenas, nunca me ha gustado ser conflictiva, yo creo que uno cuando tiene algo que decir se lo puede decir a las personas directamente o dialogar; no le puedo decir que tenía enemistades porque era muy amiguera.

¿A los cuántos años se casó?
A los 19 años. Nos conocimos desde niños porque los padres de él con mi abuela viven en el mismo bloque, entonces estuvimos en la misma escuela, en el mismo colegio, en el Hibueras, y ya en bachillerato nos separamos porque yo fui al Inmaculada y él al Alfonso Guillén Zelaya.

¿Por qué tan joven?
Por el bien de los tres, eso era muy común, recuerde que antes no tenía uno una educación sexual, bueno, todavía ahora es un tabú hablarles a los hijos sobre sexualidad.

¿Todavía está con su esposo?
Bueno, esa es una historia... Yo no sé si se la pueda contar... nosotros nos separamos hace 12 años y nos divorciamos, los dos decidimos eso porque las personas se tienen que complementar en todo y mí carrera ha sido muy sacrificada por el hecho de que a la familia siempre se le deja de último y uno puede entender que las personas se cansan de ser los últimos y yo siempre he dado lo mejor de mí para que el trabajo sea bueno. Sacrifico mucho a la familia por rendir en el aspecto profesional.

Nos separamos hace 12 años y hace un año regresamos y ha sido excelente porque han cambiado tantas veces las cosas... Es una relación cordial, es mejor que antes.

¿Cómo describe ese regreso?
Bueno, nosotros siempre hemos tenido una relación muy cordial, de respeto sobre todo, y ya se visualizaba desde hace algunos años (que podría reconciliarse).

Algunos problemas en las familias hicieron que nosotros tuviéramos más comunicación y hasta los momentos no me arrepiento porque es una relación mucho más madura que antes.

¿Está enamorada?

Yo creo que sí, creo que nunca dejé de estarlo, ja, ja, ja, ja, ja...
La etapa de enamoramiento es la etapa inicial en la adolescencia, esto va más allá del enamoramiento, fortalece una relación para que perdure muchos años.

¿Cuántos hijos tienen?
Cuatro, tres varones y una mujer.

¿Cuándo iniciaron el noviazgo?
Eso fue en segundo de bachillerato.

¿Por qué se decide a estudiar medicina?
Mire, en el instituto Inmaculada Concepción se acostumbraba que llegaban a hacer pruebas de aptitudes, yo la hice para ingeniería, porque me gustaba arquitectura, pero en ese momento no se impartía en la universidad. Me matriculé en ingeniaría industrial y cursé un año en el que aprobé las clases generales.

Al segundo año abren la carrera de arquitectura y eran pocos alumnos y en el transcurso del tiempo uno se va frustrando porque se está adaptando del colegio a la universidad y teníamos maestros a los que no les entendíamos nada, sobre todo en clases como trigonometría.

Al final me di cuenta de que no era el área que yo quería y me cambié a medicina, eso fue en 1984.Eso fue un esfuerzo doble porque yo ya estaba casada, tenía mi primer hijo.

¿Sus padres financiaron sus estudios u obtuvo beca?
No, fue mi esposo, con muchas limitaciones, en ese tiempo lo que él ganaba eran 380 lempiras y no me da pena decir que me iba con 40 centavos a la universidad, en ese tiempo costaba 20 centavos la tarifa del bus y nada para comer, pero no me salía de las clases porque sabía que al final de camino la recompensa es grande.

¿Se piensa casar de nuevo?
Yo creo que no, creo que estamos bien así.

¿De qué trabajaba su esposo?
Él trabajaba en una empresa privada, él sacó (se graduó) contaduría pública.

¿Cómo fue su crecimiento profesional dentro de la Secretaría de Salud?
Yo inicio a trabajar en el sector privado, inicié recién graduada, en un hospital privado, haciendo guardia. eso me permite tener contacto con varias personas y uno de mis pacientes me recomienda en una de las maquilas de mayor prestigio en el Distrito Central y donde en ese tiempo se le pagaba bien al médico egresado, en ese tiempo no teníamos el Estatuto del Médico.

En la empresa privada uno es evaluado de forma periódica y eso le permite mejorar.
Después me salió la oportunidad de trabajar con contrato en un centro de salud en Santa Lucía, al inicio era un contrato de seis meses.

Pero, ¿estuvo a punto de salir?
A partir de ahí el trato con las personas hizo que se fueran encariñando conmigo y, como ocurre en los períodos en que no hay presupuesto para contratos, se me llama y se me dice que se me va a cortar el contrato porque no hay presupuesto y recuerdo que varias personas del centro de salud dijeron que iban a venir para pedirle al ministro de ese entonces, Plutarco Castellanos, para que yo me quedara, pero gracias a Dios continué hasta 2002.

Y luego, ¿adónde fue contratada?
Se me llama por parte de la directora de Salud Ambiental, Mirna de Lobo, para que yo sea técnico de Zoonosis. Hasta finales de 2003 estoy en el departamento de Zoonosis y en febrero de 2003 inicio en el cargo de jefe del Programa Nacional del Dengue.

Al salir del Programa Nacional de Dengue, ¿sabía que iba a la dirección del hospital Escuela?
No, yo tenía, y se lo dije al señor ministro, tenía mi lealtad y mi compromiso de que finalizaría en el programa hasta terminar el período de gobierno (en 2014), pero hay momentos en la vida en que el carácter de las personas hace que usted sea vulnerable ante algunas situaciones y el carácter de él (Arturo Bendaña) y el mío son muy similares, yo digo que somos personas trabajadoras, pero también de “mecha corta” (poca paciencia), o sea que con nada nos enojamos, ya había pasado en varias ocasiones.

¿Cómo se produce su nombramiento como directora del hospital Escuela?
Un viernes me llama la doctora Elsa Palou para decirme que me tiene una oferta de trabajo y que nos miremos el sábado al mediodía. El sábado se me dice cuál es la oferta de trabajo, pero que hay dos médicos más para decidir quién de los tres iba a ocupar ese cargo y yo acepté el reto de ir (someterse) a esa terna para ser avaluada.

¿Cuáles son sus aspiraciones políticas ahora?
Yo siempre he colaborado con el licenciado Miguel Pastor (precandidato presidencial del Partido Nacional), aspiro a una diputación en su movimiento. Estoy agradecida por toda la ayuda que prestó al programa contra el dengue.

Así piensa de...

Roxana araujo: Trabajadora y, sobre todo, muy comprometida.

Madre: Mi fortaleza.

Padre: Sumamente cariñoso.

Esposo: Incondicional para mí.

Hijos: Lo que más quiero.

Libro: “Guerra de la luz”.

Escritor: Paulo Coelho.

Frase favorita: “Lo fácil ya lo hice, lo difícil lo estoy haciendo y lo imposible me tardaré, pero lo lograré”.

Religión: Católica.

Bebida: Limonada.
Virgen María: Inspiración.

Perfil

Nombre: Roxana Araujo Valladares.

Padre: José Araujo.

Madre: Concepción Valladares.

Esposo: Miguel Rodríguez.

Hijos: Miguel Ángel, joel, Jonatan

y Alejandra.

Profesión: Médico con maestría en epidemiología.
Cargos: Técnica en unidad de Zoonosis, directora del Programa Nacional del Dengue y actualmente directora del hospital Escuela.