Editorial

Urge el apoyo a los alcaldes

Los alcaldes de varios municipios de Honduras están demandando del gobierno un mayor apoyo para hacer frente en sus comunidades a los estragos del coronavirus.

Muchos de quienes han alzado su voz en demanda de ayuda cuestionan el escaso apoyo desde el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos, que en la mayoría de los casos brilla por su ausencia. Las demandas de las municipalidades son numerosas. No cuentan con centros de triaje, mucho menos con espacios de aislamiento para quienes resulten positivos de la enfermedad. No hay personal médico ni enfermeras y tampoco cuentan con equipo de bioseguridad ni medicinas. Hay centros de salud en comunidades alejadas que cuentan -por ejemplo- solamente con un tanque de oxígeno para uso de emergencias y con suerte una ambulancia para sacar a sus enfermos a los hospitales regionales.

No tienen pruebas PCR y las que han hecho son enviadas a Tegucigalpa o San Pedro Sula y hay casos en los que los resultados han tardado hasta un mes en regresar.

Hay ciudades en los que laboratorios privados están haciendo pruebas rápidas y el número de contagios es alto, lo que genera más ansiedad entre la población y preocupación entre los jefes edilicios. Son muchos los alcaldes que han recurrido a la solidaridad de sus comunidades para acondicionar sitios dignos para atender a sus pacientes, y como en los casos de Choluteca y San Lorenzo, con resultados alentadores. La pandemia se enfrenta y se vence con el apoyo de todos y todas, pero el gobierno a través de Sinager debe atender los llamados de auxilio de los alcaldes y darles el protagonismo que deben tener en esta lucha, atendiendo sus reclamos de inmediato y sin importar el partido al que ellos pertenezcan. Se trata de salvar las vidas de los hondureños, incluyendo a quienes viven tierra adentro, alejados del foco de los grandes medios de comunicación y de la sede de los partidos políticos, de los que menos tienen. A ellos no hay que dejarlos solos.