Cómo es posible que un reo condenado a 63 años de prisión ande libre y, en su lugar, un compinche esté en una celda cumpliendo su condena? Esta es tan solo una de las preguntas a las que las autoridades gubernamentales y del Instituto Penitenciario Nacional deben dar respuesta, ante los hechos que les han dejado en evidencia en los últimos días, tras la captura de supuestos miembros de bandas criminales que se suponía guardaban prisión en las cárceles de máxima seguridad que con toda pompa se han inaugurado a lo largo de la actual administración del Estado.
Solo este mes se han conocido dos casos de reos que han acudido a “novedosos” métodos para evadir la cárcel: Jesús V. Cruz, alias “El Extranjero”, presunto líder de la pandilla 18, condenado a 63 años de prisión en “El Pozo I” de Ilama, Santa Bárbara, de donde se escapó y en su lugar uno de sus compinches quedó cumpliendo la pena; y el del presunto cabecilla de la MS-13, Allan Josué Alvarado Cruz, capturado el fin de semana en Francisco Morazán, y, ¡vaya sorpresa!, el hombre, que debería estar guardando prisión en las celdas de máxima seguridad de la cárcel de Támara, estaba libre, circulando con una identidad falsa. A estos casos se suman los de otros reos que han logrado evadir las prisiones sin que ninguna autoridad dé cuenta de cómo lo han hecho, y aunado a ello, los decomisos de drogas y los enfrentamientos entre los miembros de las pandillas con armas de grueso calibre, de las que tampoco nadie da razón de cómo ingresaron a los penales.
Todas estas acciones solo evidencian que la millonaria inversión de la actual administración en el sistema carcelario con el fin, según palabras del gobernante, de adecentarlo y evitar que los reclusos siguieran cometiendo y ordenando crímenes desde el interior de las bartolinas, ha caído en saco roto, y que las redes de corrupción tantas veces denunciadas desde la sociedad civil siguen intactas, lo que demanda acciones contundentes encaminadas a desarticularlas para comenzar así a poner orden en las prisiones de una vez por todas.