Columnistas

Por una vocación temprana

Nunca escribí, creo, un artículo dedicado a muchachos, si bien compuse libros infantiles (“Los mayas”, “El morazanito”) y la novela “El general Morazán marcha a batallar desde la muerte”, cuyo propósito fue motivar entre los jóvenes admiración al prócer. Ahora observo que, quizás por mi distanciada edad, púberes y adolescentes fueron escaso objeto de mi devoción.

Excepto hasta hace seis meses cuando en cierta conferencia un estudiante consultó: “¿qué positivo nos aconseja?”, y cuanto aburrido de la misma respuesta (“¡Lean cuanto toquen sus manos!, la lectura es poder”) brotó de mis labios otro verbo raro y escandaloso: ¡Especialícense!

Pero, ¿cómo pides a chavos de 14 años que concentren el saber, que tal es especializarse?, y descubrí entonces que mi cerebro elaboraba la respuesta hace años: “Descubran qué les gusta, su pasión, y luego tórnense expertos en ella”.

¿Les agradan los mangas o historietas japonesas (La pieza; Boku), pues lean mil en internet y sean técnicos en el asunto… O conviértanse en duchos sobre poesía hondureña, pintura primitivista, billar de carambola, la guerra mundial o el caza ruso Sukhoi-57 de quinta generación, diseñado para comando furtivo y combate cerrado dogfight y que recorre 2,600 km por hora. Y por qué no en escarabajos y entras a conocer la maravilla de los coleópteros de Honduras, que es un paraíso, desde el escarabajo rinoceronte, el pelotero, el de hoja de lirio al gran Goliat (Dynastes hercules).

Hay 350 000 especies suyas en el mundo; y 340 sirven para consumo humano. La mayor gama de las conocidas carece de aguijón en tanto otras poseen sustancias algo tóxicas e irritantes. El Chrysina gloriosa o escarabajo esmeralda o gema, de coloración verde brillante, es apetecido por coleccionistas, con mercadeo de hasta cien dólares (pero no lo hagas, no dañes la naturaleza).

¿Y qué tal documentarte a fondo en pinos, que nadie sepa más que tú, y entras a ser dómine sobre las variedades Ayacahuite y Pinus Caribaea (variedad Hondurensis), el Hartwegii y el Maximinoi; nuestro Pinus Oocarpa (arriba de mil msnm), el pseudostrobus y el Tecunumanii?

¿Y qué tal dedicarte al excepcional reino de grillos, libélulas, luciérnagas o mariposas, cuya Morpho azul alcanza 20 centímetros de envergadura (ala a ala), siendo la más ancha del orbe y que habita en exclusiva los bosques de La Mosquitia en Honduras y Nicaragua? En el planeta existen unas 18,000 especies de mariposa, colores y tamaños, pero dentro de esa enorme variedad la más brillante ama nuestras tierras. ¿Te atrae dedicarte a ella…?

En años, si estudias afanoso, serás especialista obsesivo y temprano. Tus maestros de secundaria y universidad admirarán la autonomía de tu conocimiento, temblarán quizás en duda. “Cipote llorón, sabe más que yo”. Y eso le dará fuerza omnipotente a tu personalidad, aumentando tu seguridad y vocación de vida.

Pues son pocas personas las que comprenden que el saber no es solamente ejercicio de neuronas sino presencia social. Aquel que mejor administra la lengua se expresa como ideal orador. Quien domina hasta el torción de brazo una materia se convierte en consultor, asesor, dirigente, líder, y es tan fácil hacerlo. ¿Te animas a concretar lo que deseas hacer de tu existencia…?