Columnistas

El poder del soberano

Cuando la voluntad del soberano se mancilla hay que defenderla, el soberano tiene la capacidad de quitar y poner gobernantes, estos ya no gobiernan por la voluntad de Dios, sino que nos hemos acreditado dicha autoridad porque hemos evolucionado dejando en el horizonte del tiempo la Edad Media y su jerarquía de reyes, nobles y siervos, tras ir alcanzando estadios de conocimiento y dejando las formas de gobierno que estaban definidas por las leyes clericales y la razón y la democracia se vienen a sentar en los países que dejan que sean sus pueblos los que escojan a sus gobernantes.

Es difícil la comparación entre pueblos que son avasallados y los avasalladores que emplean sus recursos económicos para potenciar sus fuerzas guerreras o utilizan su fina y sutil diplomacia para que países de bajos recursos, de mentalidad rural, que está afectada por desnutrición, mala salud, pobreza de conocimientos en las diversas ciencias que hacen la explosión de la sapiencia y explotan en riquezas que usan para gobernar y obtener los recursos de los pueblos engañados por los espejitos y cuencas de cristal que apantallan a los ignorantes, entregando sin condición las carnes de sus hijos para su explotación.

Después son los plenipotenciarios de naciones los que ponen y quitan mercachifles que por beber una copa de whisky o brandy con el mister rubio y obtener favores personales, y no para el soberano, se entregan cuál ramera por un puñado de dólares. A estos mercachifles los utilizan a su conveniencia y es así como se entrega la patria. Por ir a visitar Disneylandia se visten de esmoquin en las celebraciones del 4 de julio y aunque estén elegidos bajo condiciones fraudulentas, aunque sepan que “la lista” de vendedores de conciencia y patria sean muchos no la salen encabezando porque son ellos los que acreditaron la ilegalidad de su elección sin importar que la Constitución fuera mancillada, profanada y rota para ser utilizada como papel para el servicio.

Mientras el soberano muere como mosca en la miel, porque desean que el soberano ahora sometido a todas las barbaries inventadas después de hacer de la Carta Magna un hazmerreír entre las naciones del orbe, los buitres que se alimentan de sus carnes pueden impunemente seguir haciendo lo que se les antoja porque el soberano está esclavizado por los sátrapas de la corrupción e impunidad.

Es triste que un país denominado “democrático” esté siendo entregado, sus riquezas malversadas paran en los bolsillos de ladrones que perdieron el decoro de llamarse hombre e hijos de esta patria grande porque su afán es obtener las mayores riquezas a través del saqueo de las arcas del Estado. Como pueblo solo damos un grito de protesta, nos intimidan con los toletes que rompen carne y huesos y salimos en desbandada, ya nos tomaron el pulso, y aunque salgan muchos en defensa de la soberanía, del territorio, de las riquezas, se acaba el ruido así como el rayo que hace un gran estruendo, sale el relámpago y luego se apaga dejando la sensación de que nada pasó.