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Migrantes acampan afuera de albergue de Nueva York pese bajas temperaturas

Los albergues están tan llenos que los mismos migrantes decidieron acampar afuera de los complejos en pleno invierno
28.01.2024

NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.-El complejo de la Isla Randall, Nueva York, que es el albergue más grande de la ciudad para solicitantes de asilo, se encuentra saturado de migrantes de diferentes nacionalidades.

Está tan lleno que los mismos migrantes han tenido que colocar sus propias tiendas de campaña afuera del albergue, aguantando las bajas temperaturas que actualmente se están viviendo en este sector de Estados unidos.

Una migrante venezolana aseguró que lo que viven es duro. “Yo tengo muchos enemigos y a ninguno yo les recomiendo nada de eso”.

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Las personas hace lo que pueden para poder subsistir, cabe mencionar que al estar a la espera de asilo no puede trabajar, pero ellos buscan la manera.

Desde café hasta cigarros, zapatos deportivos y pantalones vaqueros, los migrantes venden lo que sea para poder vivir.

“Vendiendo café, porque no conseguimos trabajo aún”, dijo el hombre de 27 años. “Llegamos en el invierno y en diciembre no hay mucho trabajo”.

Medidas para controlar la población

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió el viernes a los republicanos del Congreso que aprueben un proyecto de ley bipartidista para controlar la migración que permitiría “cerrar la frontera” con México “cuando esté colapsada”.

“Lo que se ha negociado sería -si se aprueba como ley- el conjunto de reformas más duras y justas para garantizar la seguridad de la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país”, afirmó en un comunicado.

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“Me daría, como presidente, una nueva autoridad de emergencia para cerrar la frontera cuando esté colapsada”, precisa.

“Y si tuviera esa autoridad, la usaría el día que firme el proyecto de ley”, añade el demócrata, en un tono inusual en él.

Por el momento se desconocen los detalles del acuerdo que negocian un grupo de congresistas conservadores y funcionarios gubernamentales desde hace dos meses.

Estas negociaciones son un intento por salvar un paquete de ayuda a Ucrania solicitado por el presidente al Congreso pero condicionado por los republicanos a un endurecimiento de la política migratoria.