Tegucigalpa, Honduras.- Luego de casi cinco meses de retraso, el Consejo Nacional Electoral (CNE) procederá en las próximas horas al pago de cerca de 65 millones de lempiras a las empresas de transporte que brindaron servicios logísticos durante las elecciones primarias del 9 de marzo.
El anuncio fue confirmado por el dirigente del rubro, Óscar Aguilar, quien señaló que el gremio se encuentra a la espera del desembolso tras la resolución de un obstáculo administrativo que había paralizado el proceso.
“Hoy nos vamos a presentar al CNE, ya que el día de ayer (martes) el Ministerio Público devolvió formalmente la documentación relacionada con el contrato y el proceso de licitación. Eso era lo que había detenido el pago”, explicó Aguilar.
Los transportistas denunciaron que, a pesar de haber cumplido en tiempo y forma con el contrato, no recibieron anticipo alguno, lo que los obligó a endeudarse con instituciones financieras para poder operar durante el evento electoral.
“Hace cinco meses se realizó el trabajo y ya estábamos en una situación precaria. Los proveedores necesitan el dinero, y nosotros también, porque cumplimos con lo acordado”, añadió el dirigente, visiblemente molesto por la prolongada mora.
Muchos transportistas se vieron sometidos a presión de la banca, al no poder cubrir los pagos de las obligaciones adquiridas para cumplir con el contrato firmado con el órgano electoral, afirmó.
¿Licitaran para las generales?
A pesar del descontento por la demora en el pago, el sector transporte está dispuesto a seguir prestando sus servicios en el proceso de elecciones generales del 30 de noviembre, según lo aseguró Aguilar.
“Estamos listos para someternos al proceso de licitación. Si salimos favorecidos, participaremos, porque tenemos la capacidad operativa y la experiencia para hacerlo”, indicó.
Aunque las elecciones primarias estuvieron marcadas por una serie de irregularidades e impasses que retrasaron por horas la llegada del material electoral a los centros de votación, los transportistas aseguran tener la logística y la estructura para movilizar las urnas a nivel nacional, en caso de ser nuevamente contratados por el CNE.
Este rotativo corroboró que las unidades tardaron hasta 15 horas para llegar a centros de votación cuyas rutas eran de 5 minutos.
El retraso causó malestar entre la población. Algunos se quedaron en los centros de votación esperando que llegara el material electoral, pero otros desistieron de ejercer el sufragio.