Elvin Alexis Romero es un productor que ha duplicado su cosecha de maíz y frijoles utilizando técnicas innovadoras y nueva tecnología.
Romero recuerda que cuando cosechaba con los conocimientos propios producía 60 quintales de maíz y frijol por manzana. Sin embargo, con la llegada del proyecto impulsado por Usaid, Acceso, está produciendo 120 quintales.
La fórmula está en las técnicas agrícolas utilizadas, que van de la mano con la tecnología en la cual se apoyan, que es brindada por la institución.
Además de aumentar la productividad también aprovechan las mismas parcelas para hacer otros cultivos durante el año. “El éxito es el cambio que hemos tenido, antes sembrábamos maíz y frijoles, ahora estamos con cebolla, calabaza y zanahoria, y duplicamos nuestra cosecha de granos básicos”, dijo Romero.
En Cane son unos 180 productores los que forman parte del proyecto de Usaid Acceso, y que siguen mejorando y diversificando sus cosechas.
Proyecto
USAID Acceso es un proyecto de cuatro años financiado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional que está trabajando para hogares rurales que viven en extrema pobreza.
Además de la asistencia técnica en producción brinda otros componentes, entre ellos nutrición, salud y cómo aprender la elaboración de tortilla fortificada con hojas verdes.
Según datos de USAID, solo en La Paz han atendido 5,777 hogares, que han dejado un total de 27,594 beneficiarios.
El programa se extiende al departamento de Lempira, Ocotepeque, Copán, Intibucá y Santa Bárbara. Desde 2011, el proyecto de USAID comenzó a beneficiar a los agricultores de los diferentes municipios de La Paz, donde técnicos brindan asistencia técnica y capacitación para mejorar las capacidades de producción, habilidades de postcosecha, manejo y comercialización.
“El proyecto está dirigido para dar asistencia técnica a productores de extrema pobreza, pero en Cane hay pocos, entonces se estimula a los productores para que generen empleo”, comentó Mario Cho, gerente de producción de Usaid en la comunidad.
Diversificación
Los agricultores están experimentando sembrar otros productos agrícolas utilizando las mismas parcelas de tierra durante el año sin que disminuya su producción.
Un ejemplo es Alfonso Lizardo, productor que antes producía vegetales orientales y que ahora incursiona en la siembra de granos y verduras.
Empezamos con productos orientales como cundeamor y berenjena y los hacíamos de manera artesanal, pero ahora sembramos maíz a un ritmo más elevado y chile, pronto empezamos con la zanahoria”, relató Lizardo.
Verduras como cebolla roja, amarilla y blanca, zanahoria de bajillo, papaya, tomate y chile son los cultivos con los que se están experimentando en la zona para expandir las opciones de trabajo.
Tecnología
En las parcelas que fueron seleccionadas por el programa existe un sistema de riego que fue ampliado de 25 a 180 manzanas y se instaló una estación telemétrica que sirve para saber la cantidad de agua que debe utilizarse al regar los cultivos.
Bajo esta estación se aprende a no desperdiciar el agua y solo utilizar lo necesario.
Empleo
El proyecto no solo está diseñado para aumentar la productividad sino también para generar empleo e impulsar nuevos productores.
Adolfo Bustillo Matute es empleado de uno de los productores de la comunidad, pero bajo el proyecto de Usaid el patrono debe brindarle una parcela para que cultive.
“Llevo el control de la fertilización, riego, fumigación y siembra de maíz, cebolla y calabaza kabocha en las manzanas de mi patrón, trabajo de 6:00 a 12:00 del mediodía y a la 1:00 de la tarde me da un pedazo de tierra y me dedico a lo mío”, explicó Matute.
El jornalero añadió que por los momentos cultiva maíz, pero dentro de 15 días lo hará con la cebolla. Según coordinadores del proyecto, el 70 por ciento son empleados de productores, pero que están optando a tierra prestada para hacer su propio cultivo.
Además, Usaid da un bono económico para las personas que logren cierta meta en cuanto a producción de calidad.