Un par de ojos castaños que desprenden una sonrisa tierna y angelical, una hermosa cabellera que a la perfección se armonizó con su escultural figura mágicamente se fusionaron a través de un juego de sensuales movimientos de cadera que la palillona Paola Loany García tuvo que derrochar para enamorar a nuestro lente fotográfico y convertirse en la portada oficial de diario EL HERALDO en su edición especial de los desfiles patrios.
Su encanto trascendió más allá de sus gráficas, que fueron plasmadas en miles de ejemplares, por lo que la guapa estudiante de primer año de bachillerato en ciencias y letras del Instituto Renacimiento llegó a nuestra Sala de Redacción para regalarnos una dosis de belleza y simpatía y compartirnos sus primeras impresiones, su alegría y emoción ante la sorpresa de convertirse en la imagen principal del periódico de mayor influencia en el país.
Después del agradable intercambio de saludos con el personal que labora en este rotativo y sin soltar su inseparable bastón, nuestra palillona se tomó unos minutos para dejarnos entrar en su corazón y conocer cuáles son las aspiraciones, sueños y proyectos que actualmente coronan su vida. La joven, con apenas 17 años de edad, es originaria de Tela, y pese a que este es su primer año de residir en Tegucigalpa, confesó que sus ojos brillaron más que nunca al verse convertida en toda una celebridad y en ocupar un espacio preferencial dentro de un acontecimiento histórico.
Cuéntenos, ¿qué sintió al ver que engalanaba la portada del periódico más importante del país? Para mí fue algo realmente increíble, muy bonito y me sentí muy satisfecha al saber que había dado lo mejor de mí para representar dignamente mi colegio y a mi patria, la gente comenzó a llamarme para felicitarme por mi trabajo y el privilegio que este medio de comunicación me dio en ocupar la imagen de su portada.
¿Qué le ha dicho la gente?
Mi familia está muy emocionada, es algo impresionante e indescriptible porque te das a conocer en todo el país y hasta en otras partes del mundo, algo que me impactó mucho fue ver la aceptación el sitio web de EL HERALDO y las redes sociales, ver los comentarios de los fans y saber que no solo los hondureños aprecian la belleza.
¿Ha participado en otros años como palillona? No, este fue mi primer año incursionando en este tipo de participaciones, en años anteriores incursioné en los desfiles representando a los departamentos.
Para usted, ¿cuáles pueden ser las cualidades que debe tener una verdadera palillona?
En primer lugar tiene que ser una chica inteligente, es decir, tener buenas notas y demostrar que posee algo más que belleza, en nuestro caso todas las que participamos fuimos seleccionadas por nuestro índice académico, además de los atributos físicos que se toman en cuenta para integrar el grupo de palillonas, como simpatía, alegría y entregarse al público al momento de manipular el bastón y al escuchar el ritmo de la banda.
¿Cómo hace una palillona para ganarse el respeto y la admiración de todos y al mismo tiempo moverse sensualmente?
Lo primero que una palillona debe cuidar es no caer en la vulgaridad, tiene que ser astuta y jugar mucho con la mirada, que proyecte alegría, simpatía y al mismo tiempo ser coqueta, quedar viendo a las personas para demostrarles que estás prestándole atención a sus halagos y a sus aplausos, no solo ver al frente ni a una sola cámara, tienes que hacerles ver que por ellos estás ahí.
¿Cuáles son los sueños o aspiraciones que actualmente coronan su vida?
Quiero graduarme con honores para tener la oportunidad de estudiar medicina, sueño con ser médico y de esa manera hacer mi aporte para el bienestar del país. No todo es belleza, hay que prepararse para tener mejor calidad de vida.
Puede compartir algún secreto o tip para todas aquellas chicas que aspiren a convertirse en la portada del próximo año. Pues lo más importante es que se entreguen en todo lo que hacen y que al momento de participar lo hagan con entusiasmo, con mucha alegría ya que eso se proyecta y es lo que finalmente contagia al público, y desde luego a las cámaras y que se olviden de la pena, porque es un esfuerzo que al final la gente valora, hay muchas personas que acuden al Estadio por vernos y hay que llenar las expectativas del público en todo sentido.
Irradiando el mismo carisma, belleza y simpatía que la llevó a convertirse en la palillona 2013, Paola aún no se despidió de EL HERALDO por lo que no dudó en continuar su recorrido por nuestras instalaciones y pidió conocer al resto del personal administrativo y todas aquellas personas que de alguna u otra manera hacen posible la labor que se realiza en este medio de comunicación.Amablemente, la hermosa bastonera accedió a tomarse fotografías con varios empleados y algunas personas que se le acercaron para felicitarla y expresarle ocurrentes piropos.
