Hasta cinco metros miden cocodrilos que proliferan en la Costa de los Amates
En el país no hay expertos para realizar un control poblacional de cocodrilos en el río Goascorán, advierten desde el ICF; son los pobladores que deben respetar el hábitat natural de los reptiles
- 17 de junio de 2025 a las 17:57

Alianza, Valle.- Los cocodrilos no solo están en el río Goascorán, también se pasean por las calles y en la ribera del afluente, situación que mantiene en alerta a los pobladores de la Costa de los Amates, en Alianza, Valle, que han logrado grabar videos de los reptiles que llegan a medir entre cuatro y cinco metros de longitud.
Las autoridades y los pobladores han compartido las imágenes de los cocodrilos pasando por el paso inundable hacia la Costa de los Amates en horas de la noche, y otros en las laderas buscando alimento, eventos que cada vez son más comunes.
"Los cocodrilos aparecen cuando uno anda pescando, algunos tienen miedo y se van —pero- en la mañana anda en la orilla, hay unos que son grandes y las hembras andan paridas, con sus crías en el agua", narró a EL HERALDO Plus el pescador José Aguilar, quien habita en el comunidad de La Laguna, Alianza, Valle.
Son varios los hombres que salen todos los días a pescar al río, siempre los ven a distancias de unos 30 metros, pero cuando los animales sienten la presencia de personas se hunden en el agua y desaparecen, porque se van para lo más hondo.
"Todos los días los vemos y si usted se viene oscurito están en el playón, descansando, se ponen a calentar sol a buena mañana, son bastantes", afirmó.
Don José, mientras lanzaba su atarraya, con la esperanza de hallar un pez para la cena, contó que ellos pescan en el río y nunca los han atacado, y eso que se meten con el agua hasta el pecho, por eso no cree de las denuncias de algunas personas.

Helder López, presidente del Comité de Emergencia Local (Codel) de El Cubulero, aseguró que existe una proliferación de cocodrilos y lagartos en el río Goascorán, generando temor en la población para usar el agua del afluente.
"Los hemos visto en el cauce de Ercilia, en la plancha, en horas de la noche, que anda merodeando, incluso algunos, cuando se desborda el río y se inunda El Cubulero se iban para allá", contó.
López afirmó que han reportado ataques, uno de ellos fue a un niño de 12 años, quien fue rescatado por su hermana de 14, ya que cuando su madre estaba lavando la ropa el reptil mordió al menor, casi le arranca un glúteo y golpeó a la niña cuando ambos jugaban en el agua.

Las víctimas fueron identificados como Marcio José Chévez Reyes y Nailyn Yohely Chévez, quienes fueron atendidos en centros hospitalarios de la zona y en el Materno Infantil.
En los enormes charcos que se forman en la Costa de los Amates, también se han escondido algunos cocodrilos, que han tenido que ser capturados por los habitantes, evidenciando el aumento de la población de este tipo de animales.
Controles
Rodil Gallegos, coordinador del Comité de Emergencia Municipal (Codem) de Alianza, afirmó que hay lagartos, cocodrilos y caimanes en la zona, volviéndose un problema serio para las comunidades, porque muchos temen hacer uso del agua del río ante un posible ataque.
En los avistamientos han logrado identificar cocodrilos de cuatro a cinco metros de largo, demostrando que son especies bastante desarrolladas y eso vuelve más vulnerables a las personas, porque son animales muy grandes, afirmó.
Los animales han proliferado desde el sector de Calpules, por el mismo cauce de Ercilia hacia la parte baja del mar, y llegan hasta El Cubulero en tiempo de inundaciones, metiéndose a las viviendas.

Gallegos solicitó al Instituto Nacional de Conservación Forestal (ICF), realizar un estudio y tratar de ejercer un control sobre la sobrepoblación de este tipo de animales, porque cada vez corren más riesgo.
En tanto, el jefe regional del ICF en el Pacífico, Ronal Castillo, confirmó que en toda la franja de la Costa de los Amates se han registrado avistamientos y un ataque que en su momento no se pudo identificar si fue un cocodrilo o algún tipo de pez.
Los biólogos del ICF que evaluaron la mordida a los afectados mencionaron que habían sido un pez, porque fue donde desemboca el río Goascorán, señaló.
Confirmó que recientemente si han tenido avistamientos de cocodrilos en el cauce de Ercilia, por ello este miércoles realizarán una visita con técnicos del ICF y del Comité para la Defensa y Desarrollo de la Flora y Fauna del Golfo de Fonseca (Codefagol), pero dependerá si hay paso en el vado por las inundaciones.
Rótulos de advertencia
El experto afirmó que debido al peligro que representan los reptiles, en la zona han colocado rótulos de advertencia, donde se le recomienda a las personas que no ingresen al río porque existen cocodrilos, ya que ellos están en su hábitat natural.
No descartó que la población de los animales haya aumentado y ahora en tiempo de inundaciones con las crecidas de los ríos es más peligroso, porque las aguas están revueltas y no se ven, y es más probable que puedan cometer algún tipo de ataque.

Como esa zona es el hábitat de los cocodrilos, todos los años se están registrando avistamientos, por eso se han instalado los rótulos de advertencia para que la población esté atenta y sobre todo ahora que el río está hondo y el agua está turbia.
También realizan monitoreo de vigilancia con una persona, es decir, una guarda recursos, para poder tener identificadas las áreas y la población de este tipo de animales.
Destacó que el control poblacional de cocodrilos se debe hacer con especialistas, pero en el país no hay expertos que puedan ingresar al agua y buscar los animales para reubicarlos a otras zonas del país.
“Nosotros trabajamos con los Bomberos y las Fuerzas Armadas, pero tampoco ellos tienen el equipo o la capacidad para poder atraparlos y reubicarlos, porque el manejo y contención de esta especie es complicada”, indicó.

Es de tomar en cuenta que los cocodrilos son sumamente territoriales y eso provoca que se corran muchos riesgos al momento de querer hacer un control, pero sí se ha comprobado que se están reproduciendo.