JAQUE. Pues, hombre, Hilario, parece que el olanchano al final se salió con la suya y ha matado tres pájaros de una sola pedrada con el regreso de los hijos pródigos, el apoyo de la bancada liberal y, de chascada, ha dejado silbando en la loma a la bancada cachureca. Jaque mate, papa...
LLENO. ¡Ahhh!, y como para cerrar el culebrón con broche de oro, hoy habrá lleno total en el hemiciclo por el regreso de todas las ovejas “extraviadas”. Y, colorín colorado.
BARCO. Hombre, se fueron en mal barco los insurrectos. Para más LR se hizo el bravo y el fuerte desde el principio y nunca aflojó el hemiciclo.
CACAO. Al olanchano le ha ido mejor de lo que esperaba, porque hasta la bancada liberal, con el Segura a la cabeza, llegó a pedirle cacao a sus aposentos de Palacio. Muerto el rey cachureco, viva el rey olanchano, papa... ¡Y que viva el guaro, hijos del maíz!
REPETIR. La pregunta del millón sigue siendo por qué no quieren repetir la elección de LR, si ahora tienen votos hasta de sobra. Ummmm...
CHUCHO. Lunes negro para los cachurecos. El olanchano les hizo jaque mate, el imperio destapa la olla contra JOH y a Julián Pacheco le desburrungaron su estatua. Vea y no los termine orinando un chucho.
TABLA. Ajá, pero para que vean que no todo ha sido malo para los azulejos, cualquier acusación contra JOH por la tal reelección se podría convertir en su tabla de salvación si el imperio lo pide en extradición, como asegura la chapina. TAMAL. En ese tamal que los gringos le acaban de destapar a JOH dejan claro que no solo es por el tema de la corrupción y el narcotráfico, sino por “antidemocrático”.
OÍDOS. Eso de “antidemocrático”, según las malas lenguas, es por la violación a las leyes y a la Constitución, por temas como la reelección o la destitución de los magistrados aquellos, como acaban de hacer los redondos con la PGR. El que tenga oídos, que oiga.
DIENTES. Adivinen quién anda pelando los dientes de la felicidad por el clavo que le acaba de reventar a JOH. Y más feliz anda porque su wife no tarda en ser declarada inocente.
JULIÁN. “Bueno está”, como decía Margarito el Guardia, que le pase a Julián Pacheco con su estatua. Quién lo manda a andar de engreído, autoerigiéndose monumentos.
HONDUTEL. A Montoya por poquito lo dejan hule, aunque ese cadáver putrefacto que le dieron, quién sabe que lo pueda revivir.
