La educación, respeto a los derechos humanos y velar por el bienestar de las mujeres son tareas que han caracterizado la vida de Reina Isabel Cálix de Miralda desde hace más de 20 años.
Por su responsabilidad con los niños y jóvenes del departamento de Olancho ha sido designada a representar a la mujer campesina del país en eventos especiales en Ginebra, Suiza y Costa Rica, y fue delegada de organizaciones campesinas y la Central General de Trabajadores, en Holanda.
Su presencia a diario en el histórico Centro Santa Clara la convierte en una de las más destacadas personalidades del departamento.
Por su entrega a favor de la educación y el respeto de la condición humana fue nominada junto a otras cinco mujeres hondureñas como candidata al premio Nobel de la Paz, en 2005.
¿Dónde nació?
En Juticalpa, Olancho, el 23 de enero de 1939.
¿En qué escuela cursó su primaria?
En la Escuela Manuela Garay Cortés, de 1947 a 1952.
¿Y su título de maestra dónde lo obtuvo?
A través programas especiales de profesionalización; los meses de diciembre y enero viajaba a la Escuela Normal de Villa Ahumada, de Danlí.
¿Cuántos hijos tiene?
Siete hijos.
¿Usted trabajó como docente?
Sí, ejercí la docencia durante 10 años, ocho en la Escuela Francisco Morazán, de la comunidad de La Puzunca, otro años en la localidad de Santa Cruz del Potrero y otro en Punuare. En aquel momento devengaba un salario mensual de 50 lempiras.
Según usted, ¿qué ha pasado con la educación de los niños de Olancho?, pues informes estadísticos revelan que salen aplazados.
Si se hacen comparaciones con la enseñanza del pasado, la diferencia es enorme, cada docente debería tener vocación y cumplir con su responsabilidad. Hace algunos años se trabajaba con la doble jornada y el rendimiento que se alcanzaba era excelente, porque el profesor solo tenía una plaza y permanecía toda la semana en su comunidad.
Para mejorar deberían existir comisiones evaluadoras con apoyo de la sociedad organizada, así los niños aprobarían su año escolar luego de demostrar su nivel de aprendizaje.
Los jóvenes de hoy viven su mundo, no leen un periódico, no se informan y no piensan en el futuro, y también el docente no les puede exigir porque a varios los han amenazado.
¿Por qué no evoluciona la educación si ahora los docentes cuentan con licenciaturas?
Por una parte no evoluciona porque debería existir más participación de los padres de familia, la responsabilidad en la educación de los niños es de todos, la doble jornada debe cumplirse porque existe más exigencia de trabajo para los niños y los sábados deben ser utilizados para formarles en valores.
¿Es justificable que algunos padres protesten por la doble jornada?
En las comunidades donde los niños tienen que caminar grandes distancias, ahí sí existen problemas porque el regreso a casa es demasiado tarde, y corren riesgos por la inseguridad que se vive en el país.
También algunos padres tienen problemas para proporcionarles la alimentación del mediodía, este problema se vive en la zona de Jalán, en Juticalpa.
¿Cuál es su ocupación actual?
Soy la coordinadora de la Federación de Mujeres Olanchanas Urbanas y Rurales (FOMUR) y del Consejo Coordinador Regional del Sector Reformado (Coreser), integrado por seis organizaciones de varones y proyectos educativos.
¿Cuántos años ha trabajado con FOMUR?
Inicié mi trabajo con la Unión Nacional de Campesinos (UNC) y como miembro y directivo de FOMUR por 25 años.
¿Cuál es la principal función de FOMUR?
Visitar las comunidades y levantar un diagnóstico de las principales necesidades, las visitas son domiciliarias hasta lograr organizar grupos comunitarios.
De forma posterior, con apoyo del Instituto Nacional de Formación Profesional se les capacita para emprender proyectos con diferentes rubros.
¿Las capacitaciones de Infop a quiénes son impartidas?
A grupos organizados en las comunidades donde tenemos presencia con FOMUR, cada junta directiva se forma para elaborar perfiles de proyectos.
¿Cuántos grupos han conformado a la fecha?
En la actualidad contamos con 100 grupos de trabajo especializados en agricultura, producción de verduras, sastrerías, costura, detergentes, derivados de lácteos y soya.
¿Dónde funcionan los grupos organizados?
Los grupos están presentes en municipios como Orica, de Francisco Morazán; en San Esteban, Manto, Dulce Nombre de Culmí, Patuca, Gualaco, Catacamas, Mangulile, Silca, El Rosario, Yocón, Guayape y Juticalpa, en Olancho, y pronto en municipios del departamento de Colón.
¿Cuántas personas han capacitado en 100 grupos de base?
Es un promedio de 20 personas por grupo, los que a la vez sirven de efecto multiplicador, y todos se trazan metas y consiste en fundar su propia microempresa.
Estos grupos esperan contar con el apoyo de capital semilla del nuevo gobierno para continuar su transformación.
¿Qué producen los grupos que han capacitado?
Cultivan hortalizas, trabajan en repostería, producen detergentes, tajaditas de plátano y tienen planificado fundar microempresas, pero no ha sido posible por falta de capital semilla.
En la organización no se trabaja por política, lo hacen a base de esfuerzos, pues no reciben apoyo del gobierno.
Cada grupo organizado es monitoreado por la organización porque la aspiración es cambiarle la vida a las personas en las comunidades olvidadas por las autoridades.
¿Cuál ha sido la respuesta de los grupos organizados?
Ha sido positiva, las personas siempre están dispuestas a trabajar con la organización, y varios han logrado formarse a nivel académico con apoyo de la organización.
¿Fomur trabaja también con la educación de niños?
Con apoyo de maestros voluntarios se han fundado en diferentes municipios de las zonas rurales 144 Centros Comunitarios de Educación Prebásica en 16 municipios de Olancho y uno de Francisco Morazán.
Estos centros son atendidos por profesores voluntarios.
Cada año son matriculados en los centros comunitarios un promedio de mil alumnos en prekínder y kínder y un 85 por ciento de ellos ingresan a las escuelas en lugares donde no existen jardines.
Son muchas las comunidades rurales que han solicitado organizar un Ccepreb, pero no tenemos la capacidad para atender todas las comunidades.
¿Cuál es la proyección de los alcaldes donde poseen grupos organizados?
La respuesta de los alcaldes es positiva, el de Catacamas, El Rosario, Dulce Nombre de Culmí, Guayape y Juticalpa apoyan a las maestras voluntarias y les otorgan como bonificación 500 lempiras.
¿Trabaja también con el programa Educatodos?
Es uno de los programas más positivos para la organización, pues contribuye con la formación de los profesores.
Estudiantes matriculados en el programa educativo hoy son maestros de educación primaria, administradores de empresas, enfermeras y tiene graduados 80 bachilleres en ciencias y letras.
¿Con Educatodos dónde brindan apoyo?
En comunidades como Candeleros, El Chaparro, Panuaya, Mamisaca.
¿Los programas de FOMUR son reconocidos por la Secretaría de Educación?
Claro que sí, todos los documentos son legales.
¿Usted fue nominada en 2005 para el Premio Nobel de la Paz?
Sí, fui nominada a ese premio como fruto del reconocimiento del trabajo que hasta ese momento habíamos desarrollado en nuestra comunidad.
¿Qué significó para usted esta nominación?
Fue un orgullo personal y familiar, un compromiso para seguir trabajando por las mujeres, una nominación especial e inesperada.
Califico mi trabajo como un apostolado para los niños y las mujeres del campo, y fue un reto para continuar adelante, y lo he continuado nueve años más desde ese momento.
En el Centro Santa Clara, donde nos encontramos, inició la masacre de Los Horcones, ¿qué recuerda usted de ese acontecimiento?
Yo trabajaba con las UNC, fue un hecho planificado por algunas personas, la beligerancia hacia los campesinos quedó demostrada.
En este local funcionaban las oficinas de la Escuela Radio Fónica, Cáritas de la Iglesia Católica, UNC, Cooperativas Agrícolas y Consumo, había bastante movimiento y como ese entonces hablar del bien común y derechos humanos era pecado, por eso quizá sucedieron los hechos.
Lo que se había planificado era una caminata pacífica, con el fin de presionar al gobierno por la reforma agraria, porque estaba estancada, y solicitar la libertad de campesinos presos, esa era la idea de la marcha.
¿Pertenece a algún partido político?
Sí, al Partido Liberal, y en 1974 me sumé a la Democracia Cristiana por la ideología con que iniciaron, y alcancé ser diputada suplente en la fórmula de Orle Aníbal Solís.
¿Cuáles son sus planes a futuro?
Continuar con el trabajo en FOMUR hasta que Dios me preste fuerza y voluntad.