El presidente Nicolás Maduro expresó el lunes que evalúa la posibilidad de aumentar los precios de la gasolina en Venezuela, una de las más baratas del mundo, y que están congelados desde hace más de una década.
'Este es un tema sensible que ya estoy evaluando', dijo Maduro en un discurso televisado al comentar una propuesta de los participantes en un congreso de trabajadores oficialistas en la que se planteó destinar en proyectos sociales los ingentes recursos utilizados para mantener congelado el precio de los combustibles.
Resaltó que '''no hay apuros' para tomar una decisión sobre el tema, pese a que los ingresos vinculados al petróleo se redujeron en 35% por la caída de los precios del crudo.
'Caiga lo que caiga el precio del petróleo al pueblo venezolano no le va a faltar nada', agregó.
Maduro planteó en agosto que daría inicio a un debate nacional para aumentar el precio del combustible, pero el tema poco después fue dejado de lado.
La gasolina, que se vende a casi un centavo de dólar por litro, es considerada un tema sensible en el país luego que en 1989 un incremento del combustible desató violentas protestas callejeras en Caracas, conocidas como el 'Caracazo', en las que murieron varios centenares de personas. El último ajuste de la gasolina se realizó en 1997.
El gobierno ha reconocido que la estatal Petróleos de Venezuela S.A. pierde anualmente 12.592 millones de dólares por la producción de la gasolina.
En Venezuela se consumieron el año pasado 703.000 barriles diarios de combustible. Algunos analistas han planteado que el gobierno podría recurrir al aumento de la gasolina como una manera de compensar el fuerte déficit fiscal que enfrenta.
