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Caso OceanGate: Simulación revela qué pasaría con el cuerpo humano en una implosión a 3,800 metros de profundidad

El video sugiere que la duración de la implosión fue de 20 milisegundos y el tiempo que responde al dolor el cerebro humano es de 150 milisegundos, por lo que los tripulantes probablemente no sintieron lo que les pasó
16.08.2023

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.- Un video que se ha viralizado en redes sociales, muestra una simulación detallada para comprender los posibles efectos en el cuerpo humano en caso de una implosión catastrófica a 3,800 metros de profundidad en el mar, tragedia que le sucedió a cinco tripulantes que iban a bordo de un submarino de la compañía OceanGate y murieron el pasado 18 de junio tras una expedición al Titanic.

“¿Qué le pasaría al cuerpo humano en una implosión a 3800 metros de profundidad? Aquí una simulación lo que habría sucedido tras la catastrófica implosión del sumergible Titán de OceanGate”, se puede leer en el post realizado a través de X, anteriormente llamada Twitter.

La simulación arroja luz sobre cómo el cuerpo humano reaccionaría ante una implosión a tal profundidad. Los resultados, aunque impactantes, proporcionan información valiosa para comprender los peligros y desafíos asociados con la exploración submarina extrema.

La conexión de Wendy Rush, esposa del CEO de OceanGate, con el Titanic

Según la simulación, la muerte en estos casos se produce de manera instantánea y en cuestión de segundos debido a la alta presión que produce este fenómeno de manera violenta.

El video sugiere que la duración de la implosión fue de 20 milisegundos y el tiempo que responde al dolor el cerebro humano es de 150 milisegundos, por lo que los tripulantes probablemente no sintieron lo que les pasó.

¿Qué es una ‘implosión’?

En una implosión, causada por un defecto en el casco o por cualquier otro motivo, el sumergible se derrumbaría sobre sí mismo en milisegundos, aplastado por la inmensa presión del agua.

La muerte sería prácticamente instantánea para los ocupantes.

A la profundidad a la que se encuentra el transatlántico, la presión del agua multiplica por 400 los valores de la superficie marina. A modo de comparación, la mordedura de un gran tiburón blanco ejerce una fuerza de casi 275 bares, según Scientific American.