La seguridad en la ceremonia de traspaso presidencial que se celebrará mañana está garantizada.
Al menos así lo aseguró ayer el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, en una cadena de radio y televisión.
El presidente saliente, Porfirio Lobo Sosa, se encargó de ofrecer un mensaje a la ciudadanía. “Honduras asiste en estos días a uno de los momentos más importantes de la consolidación de la democracia en el país”, expresó el mandatario.
Destacó la masiva participación del pueblo hondureño en las elecciones generales del 24 de noviembre. Dicho proceso electoral concluye con la investidura mañana de Juan Orlando Hernández, como presidente de la República.
“Miramos con alegría, con fe y con renovada esperanza, el tránsito institucional hacia un nuevo gobierno que se inicia a partir de ese momento”, dijo.
Afirmó haber cumplido a cabalidad y con firme voluntad, con la responsabilidad de hacer todo lo que estuvo a su alcance para facilitar una transición en forma responsable y ordenada.
“Nos queda únicamente culminar esta fiesta cívica acompañando en la tradicional ceremonia de toma de posesión del nuevo Presidente en el Estadio Nacional”, indicó.
“Nos corresponde a nosotros asegurar que todos los eventos que se han programado transcurran dentro de la más absoluta normalidad, sin sobresaltos y en un clima de total seguridad y orden”, afirmó.
Auguró una fiesta cívica como el pueblo lo merece, y un ejemplo de espíritu de convivencia democrática del pueblo hondureño, que se pueda disfrutar en compañía de más de 80 delegaciones internacionales.
“Las medidas y precauciones necesarias para asegurar la paz y la tranquilidad han sido dispuestas hasta el más mínimo detalle, en el Estadio Nacional y en sus alrededores”, garantizó el mandatario, quien invitó a la ciudadanía a concurrir masivamente a estas celebración.
Lobo Sosa compareció acompañado de otros miembros del Consejo de Defensa y Seguridad; del fiscal general, Óscar Chinchilla; el general Fredy Santiago Díaz, jefe del Estado Mayor Conjunto; de Marlon Pascua Cerrato, ministro de Defensa; Arturo Corrales, ministro de Seguridad; del director de la Policía Nacional, Ramón Sabillón; y el general Julián Pacheco Tinoco, titular de la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia del Estado.