Tegucigalpa, Honduras.- Rixi Moncada, candidata presidencial del Partido Libertad y Refundación (Libre), evadió responder a la consulta si traerá o no la Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH) en caso de ser electa como presidenta en las elecciones generales del 30 de noviembre.
La exministra de Finanzas y también exsecretaria de Defensa en el gobierno de Xiomara Castro participó en un debate organizado por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y fue consultada dos veces por la CICIH, sin dar una respuesta concreta.
Por el contrario, trasladó parte de la culpa a la Organización de Naciones Unidas (ONU), olvidando que ella fue parte de la comisión negociadora y el oficialismo ha incumplido con una de las banderas de campaña de Xiomara Castro.
En relación con el combate a la corrupción, Moncada inició diciendo: "Hay que comenzar con la reforma estructural, con el sistema de justicia. Un país donde sus magistrados en elección de segundo grado le dan la cancha al poder representativo y esa cancha se la marcan los 25 grupos económicos de las 10 familias que están representadas en el Cohep (Consejo Hondureño de la Empresa Privada), no se puede aspirar a tener justicia".
Continuó acotando: "Simplemente, hay 15 magistrados en el más alto tribunal de justicia, magistrados que son elegidos por el poder económico, este país, por las cúpulas del poder económico de este país y uno no puede aspirar a tener un sistema de justicia independiente e imparcial".
"Creo que toca avanzar en el proceso de refundación con una propuesta estructural, orientada a darle la forma originaria a la Constitución", abonó.
Al ser consultada directamente si traerá la CICIH, apuntó que es más importante reforzar el sistema de justicia nacional.
"Tengo una experiencia de por lo menos 10 años dentro del sistema judicial y fiscal y quienes me conocen saben de mi condición implacable contra la corrupción, pero aquí se persigue la corrupción de baja calaña porque la corrupción público y privada legalizada es una corrupción intocable, la llevan al Congreso y está legalizada".
Recordó que "la Maccih la sacó el Partido Nacional y Liberal y ahora dicen que quieren una CICIH. Yo le apuesto a un sistema de justicia robusto, a un sistema de justicia legitimado y por eso es que es importante profundizar en el sistema democrático y entrar en las consultas populares ".
A criterio de la candidata, es una vergüenza que un ente internacional busque impartir justicia en Honduras.
"Si usted me pregunta por la CICIH voy a responderle como abogada, como jurista, como exjueza o como persona que laboró cinco años en el Ministerio Público que honestamente a todos los abogados y a la academia nos debería dar vergüenza que venga un ente internacional a juzgar la corrupción en este país".
"Como la impunidad ha sido tan gigantesca y tiene tanta historia, aquí hubo un gobierno nacionalista que aprobó una ley para vender la ciudadanía y dijo que con la venta de la ciudadanía se iba a erradicar la pobreza, pero el dinero de esa venta lo depositaron en el Banco Central y se lo repartieron las mismas familias", aseguró.
Finalmente, fue consultada -una vez más- si la CICIH podría venir en los siguientes cuatro años.
"¿Qué opción es un organismo internacional para el combate de la corrupción? Nosotros deberíamos como ciudadanos legitimar un proceso de reestructuración de la justicia. La CICIH es una opción que está ahí y nosotros en el gobierno de la presidenta Castro creo que nos reunimos unas cinco veces para traer la CICIH, pero una Comisión contra la Impunidad requiere dos partes y Naciones Unidas siempre estuvo exigiendo más requisitos y más requisitos, todavía están pendiente de aprobarse más requisitos en el Congreso con las reformas", concluyó.
La Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH) fue una promesa de campaña de Xiomara Castro y parece ser que no llegará en este gobierno al no haberse dado un acuerdo entre la ONU y la administración Castro.
El órgano supranacional pidió revisar el decreto 4-2022 conocido como Ley de Amnistía Política que otorgó cartas de libertad en el actual gobierno, sin embargo, desde Libre no ha existido anuencia y eso ha limitado que la CICIH pueda instalarse.
