Familión en el INAMI: Directora contrató a hija, pareja y otros parientes

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En el Instituto Nacional para la Atención de Menores Infractores (INAMI) todo se queda en familia. La directora Ninfa Flores, con apenas seis meses en el cargo, colocó a su hija, a su padrastro, a su pareja, a sus cuñadas, a su yerno y a sus primos con cargos importantes y onerosos sueldos.

La institución, que recientemente estuvo en el ojo público por contratar policías depurados -lanzaron un comunicado asegurando que iban a salir pero continuaron- y esconder durante años en un sótano una habitación del placer, también está siendo denunciada por abuso de poder, malversación de fondos públicos y corrupción.

La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus recopiló todos los documentos de los actos indebidos a lo interno del INAMI. Los archivos evidencian la forma abusiva de operar en esta institución y comparó ciertos hechos con las disposiciones que enmarcan las leyes de Honduras.

En casa, así se sienten los empleados del INAMI; en los pasillos se encuentran entre familiares que también son compañeros de trabajo, todos son de reciente contratación y llevados por la actual directora. El problema es que la Ley de Contratación del Estado y el Código de Ética del Servidor Público prohíben esta práctica.

La primera en la lista es Kristel Montserrat Pérez Flores, hija de la directora del INAMI, Ninfa Suyapa Flores. Según el Sistema de Administración Financiera Integrada (Siafi), en la ejecución de gastos, tipo de documento “planilla” y bajo el resumen de operación “pago de salario de los empleados del INAMI correspondiente al mes de febrero del 2024”, Kristel Montserrat Pérez recibe una remuneración de 25 mil lempiras y le retienen dos cuotas, una de L 877.75 y otra de L 579.95 para un salario total neto de 23,542.29 lempiras exactos.

El Código de Ética del Servidor Público en el artículo 5 define esta situación como un “conflicto de interés” y la enmarca como “toda situación en la cual el interés personal, sea económico, financiero, comercial laboral, político o religioso de un servidor público los de su conyugue, compañero o compañera de hogar o parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad se antepone al interés colectivo, incluyendo el interés personal que el servidor público pueda tener para beneficiar indebidamente a otra persona natural o jurídica”.

La directora también tiene en su nómina de trabajo a su actual pareja, Lenin Edgardo Coello Martínez, quien recibió “honorarios profesionales con recibo #000-001-04-00000001 por concepto de capacitación de mantenimiento de flota vehicular” por el orden de 35 mil lempiras, según reportes de Siafi a enero pasado.

La Ley de Contratación del Estado en el apartado de “capacidad de los contratistas”, ubicado en la segunda sección en su artículo 15 que refiere a “aptitud para contratar e inhabilidades” (numeral seis) prohíbe negocios con el Estado por “ser cónyuge, persona vinculada por unión de hecho o parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad de cualquiera de los funcionarios o empleados bajo cuya responsabilidad esté la precalificación”.

La directora del INAMI tomó a bien que su hija también tuviera oportunidad de estar cerca de su pareja sentimental y aceptó la contratación de su yerno, Diego Román Pineda Reyes.

Reyes es un empleado permanente con un salario mensual de 25 mil lempiras, del cual tiene dos deducciones (1,974.85 lempiras y 579.95 lempiras), según reportes de marzo de 2024 del Siafi.

Flores también favoreció a su cuñada (cónyuge de su hermano), Stheffany Fabiola Antúnez, quien ostenta un salario de 40 mil lempiras, con tres deducciones: del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), del Partido Libertad y Refundación (Libre) y de la Fundación Hospital de Emergencia Policial (FHEP)

Esta información se localiza en el “pago de salario de los empleados del INAMI correspondiente al mes de marzo del 2024” del Siafi.

Sin embargo, no es la única cuñada que contrató, pues su asistente personal, Yohana Coello, es la hermana de su actual pareja sentimental. En diciembre de 2023, según documentos subidos al portal de transparencia de la institución, Coello recibió un desembolso de 17 mil lempiras por “servicios personales”, por lo que el familión está presente en casi todas las áreas del Instituto Nacional para la Atención de Menores Infractores .

Otro de los familiares de la directora contratados en este corto periodo de seis meses es Carlos Humberto Rivera Mejía, padrastro de Ninfa Flores. El salario de este funcionario asciende a 45 mil lempiras, evidenciado en el “pago de planilla de los empleados del INAMI correspondiente al mes de marzo del año 2024”.

La lista no se detiene: en los documentos de Siafi de pago de planillas de este año se logró ubicar a César Luis Castellanos Portillo, primo de la directora de la institución, y a la hermana de este, Fernanda Yissel Portillo Erazo, con salarios de 22 mil lempiras y 18 mil lempiras, respectivamente.

La directora del INAMI no es la única que tiene familiares trabajando, pues a la lista se suma Brayan Raudales, secretario general, quien ubicó en la institución a su mamá y su tío para que desempeñaran labores.

La primera es Cinthia Elizabeth Rodríguez Garay, madre del secretario general, quien recibió 35 mil lempiras por “pago de honorarios profesionales (...) por concepto de servicio de asesoría y capacitación pedagógica correspondiente al mes de febrero del 2024”.

En similar situación está el tío del secretario general, Oscar Ramón Rodríguez Garay, quien fue receptor de 20 mil lempiras por concepto de “pago de honorarios profesionales con recibo (...) por concepto en capacitación en taller de arte, pintura, baile, deporte y bisutería CPI Sagrado Corazón, correspondiente al mes de marzo del 2024”, según los documentos de Siafi a los que accedió la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus.

El listado de familiares, especialmente de la directora del INAMI continúa, pero sería interminable si se detallan puestos y salarios.

El familión no es lo único irregular en el INAMI, a la directora Ninfa Flores le salpican tres polémicas más: el primero por pagarse ella misma prestaciones labores; segundo, al aumentarse 10,000 lempiras de salario en apenas tres meses; y el tercero por aprobar gastos de representación por un monto de 10,000 lempiras para asesores, aunque la ley no le contempla ese beneficio.

En relación al pago de prestaciones se conoció que Flores, antes de asumir el cargo, ya laboraba en el INAMI bajo la modalidad de contrato con el cargo de coordinadora de investigación social con un salario de 37 mil lempiras.

Ella fue contratada por la exdirectora Persy Zaldívar -quien mandó a construir la habitación del placer-, pero cuando llegó la intervención de Policía Nacional fue trasladada para el programa de medidas sustitutivas, de donde fue despedida. En esa ocasión, le cancelaron sus prestaciones laborales.

La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus corroboró en el portal de transparencia del INAMI esa liquidación por un monto de 96,882.34 lempiras por “pago por concepto de derechos laborales e indemnización adquiridos a favor de exempleada del INAMI, Ninfa Suyapa Flores Castellanos”. El dinero fue desembolsado en agosto de 2023.

Entre agosto y una parte de septiembre del 2024 Flores estuvo fuera del INAMI (ya cancelada de su cargo), pero todo dio un giro el 23 de septiembre del 2023 cuando fue nombrada como directora del INAMI.

Ya como máxima autoridad, Flores llegó al INAMI y se aprobó un segundo pago de prestaciones, aduciendo que debían pagarle el mes que estuvo fuera de la institución con el salario completo que tenía, un porcentaje de prestaciones y 1,200 lempiras retroactivos de un ajuste que se le había hecho a los empleados desde enero a septiembre y que, según ella, no le cancelaron el primer pago de prestaciones.

Este segundo desembolso de prestaciones quedó evidenciado en la “ejecución de gastos” del INAMI correspondientes a octubre del 2023 -ya estaba nombrada como directora- y representó un desembolso de 52,397.04 lempiras.

En el detalle se explicó que correspondía a “pago por concepto de derechos laborales e indemnizaciones adquiridas a favor de la exempleada del INAMI, Ninfa Suyapa Flores Castellanos”.

En total con las dos prestaciones laborales la directora recibió un poco mas de 149 mil lempiras, según los documentos antes citados.

Los beneficios no terminaron en ese punto, pues Flores entró como directora con un salario de 75 mil lempiras en septiembre de 2023, pero tres meses después se lo aumentó a 85 mil lempiras.

Este aumento de salario selectivo quedó evidenciado en las planillas de diciembre del 2023 y enero del 2024, subidos por el INAMI a su portal de transparencia.

Por último entre las disposiciones que la directora ordenó fue que a partir de su llegada se le brindaran 10 mil lempiras mensuales de gastos de representación a Gerardo José Ardón, asesor en materia de justicia juvenil, quien lo ha estado cobrando religiosamente todo los meses.

Esta orden sería ilegal, pues en las disposiciones del presupuesto de la República, artículo 97 para el INAMI, los asesores no están autorizados para recibir este beneficio, por lo que debe de regresarlo.