Al año hay más de 35 mil partos en niñas y adolescentes en Honduras

Los expertos consideran que los embarazos en niñas y adolescentes se dan por diferentes causas y que constituyen un riesgo físico, psicológico y social. Existen programas, pero sin presupuesto

Más de 460 mil partos de niñas y adolescentes se reportaron de 2010 a 2022, con edades entre 10 y 19 años.

vie 3 de febrero de 2023 a las 1:55

4.5 min. de lectura

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- “Tenía 14 años cuando salí embarazada, estaba en séptimo grado en el colegio. Sentí un cambio brusco porque mis familiares ya no me apoyaban y tenía que trabajar para mantener a mi niña”, comenzó a relatar Yuri (nombre ficticio para proteger la identidad de la menor) al equipo de EL HERALDO Plus.

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“Esos días de mi vida fueron difíciles, pensaba mucho y me ponía a llorar todas las noches y había momentos en que pensaba en quitarme la vida”, narró la joven con voz melancólica por el recuerdo que le traía contar lo que había pasado hace cuatro años.

Era solo una niña que apenas entraba en la adolescencia, una de muchas que se convirtió en madre muy joven, cuando su cuerpo todavía estaba en desarrollo.

Su embarazo no fue planificado, pero como suele ocurrir en la mayoría de casos, vino acompañado de problemas psicológicos, físicos, económicos y sociales.

La Unidad de Datos de EL HERALDO Plus analizó los reportes de partos en menores de edad desde 2010 hasta finales de 2022; en trece años fueron 460,589 partos en niñas de entre 10 y 14 años, así como adolescentes de 15 a 19 años.

Esto quiere decir que en promedio se registraron más de 35 mil casos por año a nivel nacional. Con mucha preocupación por estas cifras, Pavlova Polanco Alvarenga, especialista en derechos sexuales y reproductivos de Plan Internacional Honduras, explicó que las mujeres que se convierten en madres siendo niñas o adolescentes pueden verse afectadas por estrés, ansiedad y miedo de la reacción que tendrá su familia, amigos y entorno.

Precisamente eso fue lo que le pasó a Yuri, quien tuvo que refugiarse en “personas conocidas que me apoyaron dándome trabajo por un año para salir adelante con la niña”, contó.

“El papá de mi hija me abandonó cuando tenía 4 meses de embarazo. Negó a la niña y se fue alejando para que no le pidiera ayuda; yo lo busqué pero me rechazó”, lamentó, al mencionar que él tenía 20 años, mientras ella estaba por cumplir 15.

El Código Penal de Honduras menciona en el artículo 249 que incurre en el delito de violación quien sostiene relaciones sexuales con una persona menor de 14 años, sin importar si fue con consentimiento. Las penas son de nueve a 13 años de cárcel. Además, en el artículo 251 establece otras penas por consentimiento del sujeto pasivo.

$!Yuri tenía 14 años cuando se dio cuenta que iba a ser madre; su pareja la abandonó.

Incidencia

La pobreza, la desintegración familiar, la migración del campo a la ciudad, la paternidad irresponsable y la falta de acceso a métodos de planificación familiar son algunas de las causas por las que desde 2010 hasta 2022 se reportan más de 460 mil niñas y adolescentes que se han convertido en madres, algunas en “madres solteras”.

A esto se suman los casos provocados por una violación. La Secretaría de Salud segmenta los partos en menores de 10 a 14 años y adolescentes de 15 a 19 años.

Las cifras analizadas por la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus muestran que los casos venían en aumento desde 2010 hasta 2016, pero en 2017 tuvo una leve baja.

Para 2010, primer año del análisis, Salud registró 28,702 partos en mujeres de entre 10 y 19 años, sin embargo, para 2022 la cifra cayó a 17,454; expertos aseguran que se trata de datos preliminares y que los casos son dos veces más.

Para 2018 se registró el pico más alto (47,324 casos), mientras que en 2019 Salud reportó una leve baja que se mantuvo hasta 2020, cuando la pandemia del covid-19 llegó a Honduras.

En 2021 los partos en niñas y adolescentes pasaron los 38 mil, mientras que en 2022 superaron los 17 mil, según Salud. Rosa Marlen Flores, responsable del Plan Nacional de Reducción de la Mortalidad Materna de la Secretaría de Salud (Sesal), manifestó que esa institución tiene programas para contrarrestar los embarazos en menores, pero que no hay presupuesto para promocionarlos en centros educativos, parque u otros lugares, por eso se limitan a darlos a conocer solo dentro de los establecimientos de salud.

Tenemos “la prevención de embarazos en adolescentes, atención integral en adolescentes, planificación familiar, preconcepcional, es decir, que las niñas pasan por una etapa de ilusión de sueño con la maternidad por lo que si se acercan a los establecimientos de salud a buscar información se daría ese tipo de atención”, comentó.

$!Expertos afirman que las campañas deben ampliarse hasta las escuelas, parques y otros puntos del país.

Departamentos

En los últimos 13 años, los departamentos de Choluteca, Islas de la Bahía y Comayagua mantuvieron la cifra de partos en adolescentes, mientras que en otros se duplicaron las incidencias.

Solo Cortés reportó en 2010 un total de 1,267 mujeres que se convirtieron en madres cuando tenían entre 10 y 19 años, no obstante, en 2016 subió a 9,395 y, entre bajos y altos, en 2021 Salud reportó 7,151 casos.

En 2022 hubo 2,583 partos en niñas mayores de 10 años, es decir, esta cifra fue el doble si la comparamos con datos de 2010. En Francisco Morazán, por su parte, se reportó 5,316 casos para 2010, mientras que en 2022 la cifra fue de 2,007; la incidencia fue prácticamente tres veces menos.

En el resto de departamentos los casos han variado drásticamente a lo largo de los años, pero para 2022 reportan una baja.

La responsable del Plan Nacional de Reducción de la Mortalidad Materna de la Sesal lamentó que aparte de la falta de presupuesto para campañas de prevención, las estrategias no se implementan “porque como aquí todo mundo opina, la iglesia, los padres sin conocer (el tema), los políticos, entonces no se han probado esas guías de educación sexual”.

Alvarenga también coincidió con estas declaraciones, sobre todo por los riesgos que representan un embarazo adolescente que, en muchos casos, pueden empezar con “depresión durante el embarazo y depresión posparto, que puede conducirlas al suicidio”, advirtió.

A esto se suman los problemas físicos (abortos, anemia, infecciones del tracto urinario, hipertensión gestacional, preeclampsia, malnutrición materna, hemorragias, parto prematuro, rotura prematura de membrana y muerte materna).

$!Expertos afirman que es necesario ampliar las campañas para prevenir los embarazos en niñas y adolescentes.

Edades

El número más alto de partos en adolescentes se reportó entre los 15 y 19 años de edad, rondando hasta los 34 mil partos por año, según los análisis realizados por este rotativo.

Salud reportó también embarazos en niñas de 10 a 14 años, llegando a atender en promedio hasta a 1,100 madres adolescentes por año.

Solo en 2022 hubo 768 partos en menores de entre 10 y 14 años, mientras la mayor incidencia fue en adolescentes de 15 a 19 años.

Este patrón se repitió desde 2010 hasta 2022, es decir, que aunque la mayor incidencia de partos adolescentes está a partir de los 15 años, hay una cifra menor, pero muy preocupante, de niñas que se convierten en madres y terminan criando otros niños.

Leyes, programas y causas que existen

1. Artículo 249 del nuevo Código Penal de Honduras

El Código Penal establece que se constituye como delito de violación cuando “la víctima es menor de catorce (14) años, aun cuando se cuente con su consentimiento”. La pena para este delito es de nueve a trece años de prisión.

2. Existen los programas, pero no el presupuesto

Existen programas como la prevención de embarazos en adolescentes, atención integral en adolescentes, planificación familiar, no obstante la Sesal no cuenta con el presupuesto para generar campañas fuera de los establecimientos de salud.

3. La causa de este fenómeno es multifactorial

Los embarazos en adolescentes se dan por diferentes causas, entre ellos están la pobreza, la desintegración familiar, la migración del campo a la ciudad, la paternidad irresponsable y la falta de acceso a métodos de planificación familiar.

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