Tegucigalpa, Honduras
Isabella tiene tan solo 8 años pero, aunque es hermosa y llena de vida, necesitaba un brazo artificial para poder hacer todas las cosas como los demás niños.
Por eso e-Nable le fabricó uno, maravilloso, lleno de colores con una mano rosada para poder agarrar las cosas que desea y dejarla crecer como una niña más.