Columnistas

A nuestro país se le ha hecho inicuo, la iniquidad está en cada lugar por donde se transita, está sentada a la par de la corrupción, impunidad, soberanas e independientes, a la vez tienen libre albedrío.

Cuando en un país se comete un delito y no se corrige, se siembra la semilla de la iniquidad, el hechor se solaza, se ríe a carcajada a mandíbula batiente, sueña con el paraíso porque ya siente que sus hermosos sueños se hacen realidad, más si fue con descaro y desenfado al cometer el hecho delictivo y observando que la ley no le imputó absolutamente nada por ser familia de poderosos empresarios o políticos, los mandan a dormir a casa con frazada caliente si el tiempo es frío o aire acondicionado si el tiempo es caluroso.

Vemos la iniquidad de los servidores públicos cuando piden coima por una labor que les corresponde hacer porque ganan un salario, si no lo engavetan, traspapelan o los hacen desaparecer, el trámite nunca existió.

Iniquidad cuando miles de familias tienen la carestía de agua potable en sus hogares o todos los servicios públicos, cuántos años transcurren para que un funcionario escuchara el clamor, las represas colapsan año a año, los racionamientos se hacen más severos y éstos se hacen de la vista gorda, hoy apenas se construye una pinche represita, mientras se gastaron millones en hacer estudios para represas de mayor envergadura, mientras las represas no se construyen los bosques donde se alimentan han sido talados, ya sea para adquirir leña, resina o madera.

Iniquidad cuando miles de niños deambulan por las calles, mientras madres con niños en brazo se abalanzan a los vehículos pidiendo una limosna y ellos a punto de ser arrollados. Miles viviendo en casas paupérrimas; cartón, lata, piso de tierra, cortina para cubrir un pequeño dormitorio donde duermen apelmazados todos los miembros de la familia, al día siguiente el fuego apagado, no tienen dinero para aplacar la tripa que les chirrea por el hambre, familias desnutridas, los servicios de salud nunca llegaron a sus hogares, no hay campaña sistemática de prevención para combatir piojos, pulgas, chinches, las diarreas, la desnutrición, enfermedades respiratorias adquiridas por el contagio al estar hacinados.

Iniquidad cuando gobiernos disfuncionales violan las leyes constitucionales, el Estado de derecho echado al garete por narcofascistas, emulando a estúpidos enquistados en repúblicas donde sufren el saqueo continuo, sátrapas del narcotráfico internacional, no buscamos el ejemplo de naciones que han llevado la prosperidad a todos sus ciudadanos sino que emulamos lo más bajo de unas naciones cuyos Estados son fallidos, realmente nos hemos vuelto tan subdesarrollados que nuestra visión, nuestros proyectos no son futuristas sino siguen anquilosado en el cacicazgo, en el revanchismo, en la apología del odio.

La iniquidad se ha sentado en el trono de la corrupción, los valores morales se han alejado como si fuesen golondrinas porque nunca llegó el invierno para que nuestros espíritus sean lavados y volvamos a ser hombres y mujeres dignos de la patria grande llamada Honduras, ¡Bendiga Dios la pródiga tierra en que nací! Libre y civilizada, agrande su poder en los tiempos y brille su nombre en las amplias conquistas de la justicia y del derecho”. Froylán Turcios.