Cartas al editor

La gobernanza ha sido un concepto problemático en Honduras, para generar oportunidades y solucionar los problemas de los ciudadanos y para construir las instituciones y normas necesarias para generar cambios, implicando que las personas puedan participar en las decisiones que les aseguren una vida digna. Para eso, los ciudadanos necesitan que exista libertad de expresión, respeto y fortalecimiento de los derechos humanos y estar informados sobre lo que los gobernantes deciden y hacen.

El concepto de gobernanza se debe diferenciar de gobernabilidad que se refiere a la capacidad de los Estados para gobernar en una democracia mientras que en este son las interacciones y acuerdos entre gobernantes resumiendo todas las profundas crisis estructurales y de sentido que agrietan el orden capitalista neoliberal.

De esta manera, la gobernanza en Honduras debe partir de un hecho básico fundamental, en que los sistemas formales democráticos no han logrado incluir y entregar una real ciudadanía e igualdad de derechos a las mayorías y de que estas están llegando a la conclusión de que eso tiene que ver justamente con las formas democráticas.

¿Qué factores se necesita para que exista gobernanza en Honduras?

Un aspecto clave es la legitimidad, políticas para reducción de la pobreza por medio de oportunidades de empleo disponibilidad y acceso a los recursos, protección del medio ambiente, mediante el uso sustentable de los recursos naturales, la descentralización administrativa y la tenencia de las tierras y la equidad en el acceso a ellas.

Según Pablo Chirif, la gobernanza debe ser la suma entre confianza y gobierno sino a igual que la gobernabilidad careceríamos de legitimidad, llevándonos a lo que Tomas Hobbes llamó “estado de guerra de todos contra todos” , es decir un Estado fallido lleno de violencia indiscriminada, perdiendo el estilo de funcionamiento de la sociedad.